Javi de Pedro (Viniegra de Abajo, 1973) era ‘la rosca que baloneaba cabezas’, pero hablando es directo. Ve una Real campeona de Copa que además merece serlo y no oculta cierta nostalgia por no haber podido disfrutar durante tres lustros en el club de una cita como la del sábado. Muchos recuerdan su calidad y otros afirman que “ya nadie pone balones así”. La Copa está servida, como sus asistencias.
Quedan ya unos días para la disputa de la final, ¿cómo lo lleva?
Yo lo llevo con más calma que todos éstos. Lo que pasa es que tengo amigos en Durango y nos tiramos todo el día tocándonos las narices por WhatsApp. Yo quiero que gane la Real esta final y la segunda, que la gane el Athletic contra el Barça.
¿Qué le dicen ellos?
Lo de siempre. Que hace cuatro meses les hubiésemos bailado, porque la Real estaba en un estado de forma increíble, pero ahora se quedan con el mal día que tuvimos contra el Barça. Y me dicen que ahora nos van a dar más guerra. Hay ambiente sano, nada de anti-Athletic ni anti-Real.
¿Pensaba ir a Sevilla?
Sí. Es una putada porque cuando juegas en la selección de veteranos te corresponden unas entradas. Y yo habría ido encantado de la vida. Ahora no puedo ir.
¿Cómo la va a ver?
En mi casita, tranquilo. Con una buena tortilla de patata y a disfrutar, que no se llega muchas veces a las finales. Es una ocasión especial y eso creo que lo tienen muy claro todos los jugadores.
¿Se va a poder disfrutar de esta final?
Los que tienen que disfrutar jugando son los jugadores de la Real. Pero sí se puede disfrutar y si la ganamos, mucho más. Y la segunda, ya la ganará el Athletic, yo lo prefiero, por mis amigos y porque es un equipo vasco.
El Athletic ha jugado muchas finales y las ha palmado. La Real es consciente de que es el momento
¿Por qué cree que va a ganar la Real?
Porque se lo merece, porque está haciendo una temporada increíble y porque es una oportunidad única. El Athletic ha jugado muchas finales y las ha palmado. La Real es consciente de que es el momento.
¿Es mejor equipo la Real?
En principio, sí, la Real es mejor equipo y la clasificación dice que es así. Pero en una final puede pasar cualquier cosa: una expulsión temprana, una lesión, nervios… Creo que la ausencia de público te puede quitar presión. Una final con público habría estado muy bien. En La Rioja me suelen decir que los vascos allí no podíamos estar juntos en Sevilla y yo les digo: ‘¡Quietos!’. ¿Tú les ves juntos a los del Betis y a los del Sevilla? ¿Y a los del Madrid y el Atlético? ¿Y a los del Celta y el Depor? Impensable. Pues los de la Real y el Athletic están juntos, hacen kalejira juntos y se lo pasan en grande. Siempre hay alguno que se sale del tiesto, pero el ambiente es sano.
La que se habría montado allí en Sevilla con 20.000 aficionados de cada equipo…
Nos hubiésemos bebido hasta el Guadalquivir. Zaragoza en el 87 se quedó sin agua, pues imagínate en Sevilla entre los aficionados de la Real y del Athletic…
¿Dónde le pilló la final del 87?
A mí me pillaría en el frontón de El Antiguo. Fueron mis padres. Yo fui a la del Bernabéu en el 88, en la que la poli nos dio de hostias. A mí no me dieron porque era un moco y estaba con mi padre. Antes había mucho odio a los vascos, ahora ha cambiado el tema.
Isak me está sorprendiendo. Para ser sueco, técnicamente es muy bueno. Yo jugué en Suecia y allí el nivel técnico era bajo, aunque ahora ha mejorado mucho
¿Qué le gusta de esta Real?
Mi debilidad es Mikel (Oyarzabal). Zurdito, un crack, ama a la Real, es de los nuestros. Me gusta mucho Martin (Zubimendi). El equipo está muy bien compensado. El que me pone un poco nervioso es el portero. Tanta calma… Hay días que quiero meterme en la tele para decirle que no saque todas en corto, que de vez en cuando pegue un pelotazo, porque me tiene loco y me pone de los nervios. Isak me está sorprendiendo. Para ser sueco, técnicamente es muy bueno. Yo jugué en Suecia y allí el nivel técnico era bajo, aunque ahora ha mejorado mucho. Me gusta mucho, es rápido, completo, estilo Iñaki Williams. Le falta definir un poco mejor. Darko y Nihat tenían tres y marcaban dos. Pero es muy joven.
¿Cambia mucho con o sin Silva?
Totalmente. Le ha dado un plus. Cuando él, Merino y Oyarzabal están bien, se nota un montón. Contagian a los demás. Merino se sale, es un toro, todo lo que hace lo hace bien, defiende, pasa bien. Los dos laterales derechos también me parecen unas bestias. El fútbol ha cambiado mucho, se juega a mucha mayor velocidad. No tiene nada que ver a cuando jugábamos nosotros.
Los jugadores están ahora como ciclistas. Nosotros teníamos que estar por debajo de 10 de índice de masa corporal cuando jugábamos. Éstos están por debajo de siete, como los ciclistas. Con 20 grados, tienen frío
López Ufarte dice que en su mejor versión de hace 35 años no tendría cabida en esta Real por la velocidad…
Yo creo que a mí me pasaría lo mismo. Todo ha cambiado. Antes después de los partidos te tomabas tres cervezas, ahora no pueden. Ni hacer comidas pesadas. Todo está mucho más profesionalizado porque hay mucho más dinero. Los jugadores están ahora como ciclistas. Nosotros teníamos que estar por debajo de 10 de índice de masa corporal cuando jugábamos. Éstos están por debajo de siete, como los ciclistas. Con 20 grados, tienen frío. Están todos cuchillo. La Real está haciendo las cosas muy bien con Jokin Aperribay. El campo es espectacular. Nos merecemos ganar.
La afición, también. Ha pasado demasiado tiempo, ¿no le parece?
Por supuesto. Es muy fiel y vamos a animar estamos donde estemos, seguro. Y si perdemos, seguiremos animando. No pasa nada, habrá más. Es difícil, tal y como está el fútbol, es extraño que haya dos equipos vascos en la final.
Cuando jugábamos nosotros, en la Copa nos echaban el Beasain y el Hospitalet. Hacían unos experimentos muy raros. Siempre ponían a los que menos jugaban, a los no habituales
¿Tiene la espina clavada de no haber podido jugar una final o ser campeón con la Real?
Pues sí. Cuando jugábamos nosotros, en la Copa nos echaban el Beasain y el Hospitalet. Hacían unos experimentos muy raros. Siempre ponían a los que menos jugaban, a los no habituales. Por eso, ibas a Soria y 2-0. Y luego había que meter tres aquí y de hecho nos eliminaron. Muchas veces he pensado: ‘¿Qué habremos hecho mal para no haber podido jugar este tipo de partidos?’. He estado 15 años en la Real y en ese tiempo sólo jugué una final, y fue con la Sub-21 contra Italia. Jugué un Mundial, sí, pero no es lo mismo. La Real es otra cosa. Te pones la camiseta de la Real y se te ponen los pelos de punta. Yo soy muy de la Real. Imagínate lo que supondría ganar un título.
¿Cómo ve al Athletic?
No sé qué les ha dado Marcelino, pero los mismos jugadores parecen otros. Muniain parece otro, parece que le ha puesto a cargar en un enchufe. Ahora hasta corre. El Athletic siempre es un equipo trabajador, aguerrido, pesado. Son pesados. Y luego está Raúl García, que está todo el partido comiéndote la oreja. Ojo, que es buen equipo. Le veo quizá flojo en la parte derecha de la defensa.
¿A quién le parece que hay que atar más en corto?
A Muniain. Si tiene el día y está enchufado, es muy peligroso porque tiene mucha calidad.
¿Cree que el Athletic supera a la Real en esos términos de garra y competitividad?
Sí, pero la Real tiene más calidad. Es una final y tienen 15 días para prepararla. Yo creo que la vamos a ganar. 2-0, además. Veo a la gente pesimista por lo sucedido contra el Barcelona. Fue un mal día y ya está. No hay que volverse locos.
Usted fue compañero de Imanol, ¿le sorprende verle ahora?
No. Era y es un tipo muy humilde. Un currela, un lateral derecho con garra. Lo está haciendo genial. También tiene muy buena plantilla, tiene dónde elegir, tiene cambios. Pero hay que saber colocarlos y saber a lo que juegas y él tiene las cosas muy claras. Es de la casa, lo siente y me alegro un montón.
¿Cómo era en el vestuario?
Tímido, caserito, calladito, no como yo. Cumplidor, trabajador y le gustaba mucho el fútbol. Tuvo que salir de aquí y el tiempo le ha devuelto a su sitio, que es donde quiere estar, que es la Real. Es de los mejores entrenadores de la Liga, junto a Diego Martínez, del Granada.
Yo estoy a disposición de la Real cuando ellos quieran. Si la Real me dice que tengo que hacer algo, lo hago con los ojos cerrados. Por la Real, lo que sea
¿El tiempo devolverá a Javi de Pedro a la Real alguna vez?
Si Dios quiere… Habrá que hablar con el sheriff. Yo estoy a disposición de la Real cuando ellos quieran. Si la Real me dice que tengo que hacer algo, lo hago con los ojos cerrados. Por la Real, lo que sea. Por la Real he dado mi vida y la Real me lo dio todo. Ha sido mutuo. La Real es vida para mí.
Cuéntele a la afición qué hace Javi de Pedro ahora
Estoy entre Donosti y La Rioja. Veo un montón de fútbol y juego a paddle. Ahora, tranquilidad. No se puede hacer nada. La situación que tenemos es jodida, no es ninguna tontería
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