NUEVA YORK – Las autoridades intensifican una cacería humana para dar con un grupo que supuestamente le propinó una golpiza a un taxista en Queens, la cual le costó la vida al padre de familia que ahora deja a su esposa y cuatro hijos.
La familia del hombre encontrado muerto después de un golpe mortal en la cabeza estaba flanqueada por taxistas este domingo, mientras los líderes del sindicato de taxis suplicaban que alguien presentara información que lleve a un arresto en el trágico caso.
Más de 24 horas después que el padre del Bronx detuviera su taxi por última vez el sábado por la mañana, los detectives seguían buscando a las cinco personas que los testigos vieron dejando al conductor inconsciente tirado en el suelo.
Fuentes policiales dijeron que los investigadores revisaron el video de vigilancia que muestra la parada de taxis en Queens justo antes de las 6:30 a.m., cerca de Beach 54 Street y Arverne Boulevard, donde Kutin Gyimah, de 52 años, se enfrentó con el grupo por la tarifa del viaje.
Ese mismo video muestra a Gyimah persiguiendo a los 5 pasajeros, agarrando a uno en un intento de evitar que el grupo se escapara. La policía dijo que el grupo comenzó a golpear al conductor; uno de ellos asestando el golpe en la cabeza que lo mandaría al suelo, sin poder volver a levantarse.
Los paramédicos encontraron a Gyimah tirado en el suelo. Fue transportado al Hospital St. John’s donde fue declarado muerto.
Gyimah todavía estaba en las primeras horas de su jornada laboral el sábado cuando fue asesinado, dijo el jefe del sindicato de taxis, Fernando Mateo, en una conferencia de prensa el domingo por la mañana. Además de una oferta de recompensa de $15,000 por información que conduzca a un arresto y condena, la Federación de Conductores de Taxis del Estado de Nueva York dijo que todos los gastos del funeral del hombre de 52 años estarían cubiertos.
Abigail Gyimah, la esposa del conductor, y sus cuatro hijos asistieron a la conferencia de prensa matutina, donde trajeron fotos familiares y hablaron muy bien del hombre de familia tomado demasiado pronto.
“Él era mi columna vertebral. Estoy perdida sin él”, dijo, luchando contra un torrente de lágrimas.
La investigación policial está en curso.
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