El capitán del Porto se lamentó de cómo su equipo había perdido en el último suspiro.
Pepe, en una acción de partido
Pepe, capitán del Porto, fue el encargado de hablar al acabar el choque de su equipo ante el Atlético de Madrid. “Es difícil. Dije ayer que había que tener paciencia, que Atlético de Madrid estaba muy cerrado. El equipo lo hizo muy bien en la primera parte, siempre controlando las transiciones del Atlético”, comenzó diciendo.
“Su primer disparo a puerta en la segunda parte llegó tarde y fue gol. Intentamos cerrar el medio, tenían mucha gente jugando entre líneas. Concedimos un gol difícil de aceptar, con mucha gente detrás de la línea de balón. Nunca nos dimos por vencidos, logramos igualar y, cuando se acabó el tiempo, encajamos un gol. Es muy difícil digerir este resultado, no lo merecíamos”, dijo el internacional portugués.
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