Pere Pons se despidió este jueves del “club de mi vida”. Tras 16 temporadas vistiendo la camiseta rojiblanca del Girona el futbolista ha tomado una decisión que calificó como “muy difícil”, pero motivada por “seguir con mi sueño de poder jugar en Primera”.
Con la voz cortada, Pere Pons articuló un emotivo discurso en el que quiso dejar claro varias cosas. “El Girona ha hecho todo lo posible para que me quedase, pero era muy difícil poder igualar la propuesta del Alavés por el hecho de seguir jugando en Primera División. Llegué aquí con diez años y me marchó ahora. Empecé jugando en campos de tierra y con mucho esfuerzo he conseguido llegar al primer equipo gracias a grandes profesionales que me han ayudado a ser la persona y el futbolista que soy ahora”.
Entre otras de las cosas que quiso aclarar el de Sant Martí Vell fue el tema de la conciencia. “Me marchó muy tranquilo porque lo he dado todo siempre por este club en cada instante. Ahora mi deseo es seguir creciendo como futbolista y aunque mis compañeros querían que me quedase entienden mi decisión”.
Precisamente en este sentido, Pere Pons explicó algunos de los motivos por los que ha escogido el Alavés. “Es un equipo humilde y trabajador que tiene valores muy parecidos al Girona. Una ciudad acogedora y un sitio donde puedo seguir mejorando y aumentar mi rendimiento”, dijo el catalán, que aseguró que tiene “muchas ganas de empezar ya a entrenar”.
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