Por qué se celebra San Jorge el 23 de abril

El 23 de abril es una de las fechas más importantes de todo el año para los catalanes porque se celebra Sant Jordi 2021, el patrón de la comunidad autónoma. Una celebración con mucha historia y cargada de tradición en la que, antes de que llegara el Covid-19, las calles de ciudades y pueblos se llenaban de puestos de rosas y libros. Te contamos cuál es el origen de esta fiesta.

Leyenda de Sant Jordi

La leyenda en torno al patrón de Cataluña es cuanto menos interesante. Dice que en la villa de Montblanc, en la provincia de Tarragona, vivía un dragón que tenía atemorizado a todos los habitantes. Para tratar de contenerlo, cada cierto tiempo los vecinos elegían a un habitante por sorteo y lo lanzaban al dragón para que se lo comiera.

Un día salió elegida la hija del rey, y un caballero que respondía al nombre de Jordi salió en su defensa. Se enfrentó al dragón con sus propias manos para que la princesa no muriera. Consiguió vencer a la bestia y, al atravesarla con su espada, de su cuerpo brotaron cientos de flores rojas.

Más adelante, el culto a Sant Jordi se extendió por Cataluña, Valencia e Islas Baleares en la Edad Media. Fue en el año 1456 cuando pasó a ser el patrón oficial de Cataluña. Desde entonces se viene celebrando el día de San Jordi, aunque la festividad tal y como se conoce en la actualidad nació en el siglo XIX, de la mano del movimiento cultural y político de la Renaixença.

El 23 de abril es el día de San Jorge, y coincide con el día del Libro, que la UNESCO instauró en el año 1995 para conmemorar el aniversario de la muerte de William Shakespeare y Miguel de Cervantes.

¿Quién fue San Jorge?

Un soldado romano de la Capadocia que se enfrentó a la teología del Imperio Romano y se convirtió en mártir de Jesucristo. Se hizo soldado y pasó a formar parte del séquito del emperador Diocleciano. Acabó siendo uno de sus guardias personales y luchó contra el asedio contra la comunidad cristiana promovido por el emperador. Le intimidó para que renunciara a su fe, pero se negó a hacerlo y murió decapitado el 23 de abril del año 303.

Queda muy poco para que llegue Sant Jordi 2021. Aunque no se pueda celebrar al igual que en años anteriores por la pandemia del coronavirus, sí se puede seguir la tradición e intercambiar rosas y libros.


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