A la radiante Real de la Europa League se le han ido acumulando los problemas. El desenlace de una fase de grupos con tintes históricos llega amenazado por un lunar en el expediente. Todos los argumentos que los de Imanol han puesto encima de la mesa para ser los mejores del torneo colisionan con el duro parte de bajas que asola a la plantilla. Si a la precariedad física se le une la entidad de un visitante de la talla del Manchester United, es de ley rasgarse las vestiduras ante el partido que para un sector de la crítica es el más importante de la temporada a estas alturas.
Anoeta presentará la mejor entrada de su historia en un partido de Europa para albergar el pulso a una carta entre la Real y el Manchester (18.45 horas, Movistar Liga de Campeones). Las gradas rozarán el lleno, en compensación con el solar que existe en la delantera de Imanol. Seis de las siete bajas son atacantes: Cho, Barrenetxea, Oyarzabal, Kubo, Sadiq y Silva, que finalmente no se ha recuperado. Aihen completa la enfermería. Si el entrenador tuviera disponible a todo el plantel, no parece exagerado caer en que hoy le falta más de medio equipo con hechuras de titular.
Sin margen en la alineación
La Real se clasificará como líder para octavos de final de la Europa League si le gana al United, empata o incluso en caso de perder por un gol. Dadas las eventualidades, sería una proeza, más meritoria, quizá, que ganar en Old Trafford en el mágico nacimiento de esta edición. Caer derrotados por una diferencia de dos o más goles significaría meterse en una eliminatoria de máximo calibre contra los eliminados de la Champions. La consolación pura y dura de, al menos, seguir en Europa.
Posibles alineaciones
Imanol declaró ayer, sin fisuras en su discurso, que la Real saldrá a ganar. La alineación que ponga en liza es un tanto enigmática, aunque del mediocampo en adelante apenas tiene margen de maniobra. La única novedad en la lista fue Sola. Aritz, Le Normand, Zubeldia y Pacheco se juegan ser titulares en la defensa, pudiendo Elustondo sustituir a Gorosabel en el lateral. Guevara aspira a aportar empaque en la medular, adelantando la posición de Brais, si es que Imanol sigue apostando arriba por Fernández junto a Sorloth.
Un United menos diabólico
Si a la Real le han crecido los enanos en las últimas semanas, con la proliferación de lesionados, el Manchester United aterrizó ayer en Donostia con aspecto no tan diabólico en su convocatoria. Erik Ten Hag cuenta para el partido de Anoeta con 23 efectivos. Cabe reseñar a tres bajas de peso en la delantera: Antony, Martial y Jadon Sancho. Los dos primeros se quedaron en Carrington lesionados y el ex del Borussia Dortmund se encuentra enfermo. El United recupera al central Lindelöf tras su ausencia en el último partido contra el West Ham.
Tan reconfortante para la Real es que los ‘red devils’ lleguen sin Sancho o Antony, su fichaje estrella, como que la artillería de la convocatoria vale su peso en oro. Bruno Fernandes, Eriksen, Rashford o un Cristiano Ronaldo del que conviene no fiarse lideran la potente expedición. Varane es otra baja importante en la defensa.
En Manchester existe la sensación de que Ten Hag perfila todavía el estilo indefinido de un United que no ha perdido uno solo de sus últimos ocho partidos oficiales, de los que ha ganado seis. El partido no es tan señalado para los británicos, que estarán acompañados por 1.000 hinchas en la grada, como para la Real, pero las consecuencias son las mismas: uno saldrá de Anoeta con más ventaja que el otro de cara al sorteo del lunes.
