Busquets hizo buenos todos los elogios de sus compañeros y de Luis Enrique. Ante Eslovaquia, el azulgrana mostró que la veteranía es un grado y, por supuesto, que aún tiene mucho, pero mucho fútbol en sus botas. Busquets le dio a la selección sentido del juego haciendo siempre lo correcto. La Roja jugó a lo que Busquets quiso que jugara y por fin, la selección tuvo una tarde tranquila. La afición le recompensó con una ovación de gala cuando fue sustituido. Lo hizo la afición y la UEFA que le dio el MVP del duelo.
Bien secundado por Koke y Pedri, Busquets fue el faro de la Roja con su fútbol fácil y siempre estando en el sitio adecuado para ayudar a sus compañeros. El azulgrana jugó más cerca del área de lo que es habitual y eso provocó que la conexión entre la medular y los delanteros fuese más fluida y, por fin, llegaron los ansiados goles de una España en la que Luis Enrique hizo cambios para echar mano de la veteranía. La de Busquets, pero también la de Azpilicueta, Koke y Jordi Alba. Los que más partidos han jugado en la Roja y que en sus clubs están acostumbrados a este tipo de encuentros a todo o nada. El seleccionador sabía que era una final y echó mano de los veteranos para jugarla. Acertó y tras la victoria, ya nadie se acordó de las críticas por la alineación inicial, sobre todo, por no poner a Marcos Llorente. Un triunfo que le devuelve la sonrisa a España. Al menos, hasta el próximo partido de esta Eurocopa que será el de los octavos de final.
Ni un partido tranquilo
Unos octavos en los que la Roja estará tras pasar por encima de Eslovaquia que salió a empatar y acabó goleada. Eso sí, a la Roja le costó descorchar la botella de cava. De hecho, los fantasmas aparecieron de nuevo en La Cartuja cuando Morata falló un penalti que Koke provocó haciendo gala de su veteranía. Se volvieron a escuchar pitidos en la grada por esa pena máxima fallada que ya es la quinta seguida que falla la selección española.
Dubravka y Van der Vaart
Ese penalti fallado fue un susto que arregló Dubravka, el meta de Eslovaquia que se marcó el que puede ser el gol más cómico de esta Eurocopa. Ese 0-1 fue el inicio del paseo español en La Cartuja . Dubravka fue el que propició la goleada de España y Van der Vaart, el que motivó a los de Luis Enrique a realizar su mejor partido de esta Eurocopa. Sus críticas motivaron a los internacionales españoles que le respondieron con goles y buen juego. Sin duda, la mejor respuesta
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