Hay diversas épocas en la vida, especialmente durante la pubertad, cuando los granos y las espinillas, por temas hormonales, hacen acto de presencia. Con los años se van disipando pero pueden volver a salir aunque en menor medida. Podemos seguir una serie de hábitos para evitar que salgan granos. ¿Lo descubres?
Una piel limpia y que respire es el mejor remedio para que los puntos negros no salgan. Esto y otras rutinas.
Limpieza de día y de noche
Una buena parte de la suciedad se acumula durante el día, ya sea cuando salimos o bien en casa porque también hay bacterias. Nada más levantarse hay que intentar lavarse la cara bien con agua y jabón y usar un limpiador. Y si nos hemos maquillado esta operación debe repetirse también antes de ir a dormir.
Una alimentación sana
El estado de la piel depende, en parte, de cómo nos alimentemos. Si comemos buenos y sanos ingredientes entonces estamos también cuidando la piel y así estamos menos expuestos a desarrollar toda clase de afecciones.
Exfoliaciones
Las pieles secas son las más complicadas de tratar pero los granos y las espinillas pueden salir con mayor frecuencia en pieles grasas. Necesitamos entonces, para evitar que salgan granos, una exfoliación al menos una vez por semana si tenemos este problema.
Tratamiento con el dermatólogo
Con el tiempo y los buenos hábitos diarios los granos suelen irse. Pero si seguimos con este problema entonces lo mejor es empezar un tratamiento de manos del dermatólogo que es quien debe guiarnos.
Dormir y descansar las horas necesarias
Una piel algo apagada y con acné también puede aparecer por la falta de descanso. No es una regla general pero la falta de sueño puede producir granos y un fuerte acné. Descansar y dormir es necesario para seguir con nuestras rutinas, encontrarnos mejor y evitar algunos problemas con nuestra epidermis.
Cremas hidratantes
Además de la limpieza, aplicar crema hidratante también puede salvarnos de desarrollar diversidad de problemas que tengan que ver con nuestra piel. Cada piel es diferente, así que averigua cuál es la tuya para aplicarte la que sea para ti.
Constancia en tus hábitos
Con estas rutinas es suficiente para que tu piel respire y esté a punto… pero claro necesitas constancia, y a veces cuando estamos cansados y con mucho sueño, dejamos las rutinas para el día siguiente y la piel empieza a sufrir.
Ya sabes que son hábitos que no cuestan nada y que son totalmente necesarios para que la piel siga su curso y con vida a la hora de cumplir años.