Querejeta: “Tenemos ganas de empezar, pero no sabemos ni cómo ni cuándo”


En una situación inédita como la actual, la ausencia de contratiempos es por ahora la mejor noticia. La incertidumbre preside el día a día, con lo que el regreso a la competición se convierte en un terreno abonado para las sorpresas.



Todavía se desconocen las fechas exactas, aunque se sabe que, si se reanuda la liga, habrá encuentros casi todos los días y los equipos apenas van a tener tiempo de recuperación entre partido y partido. Si la dinámica es buena, todo será más fácil, pero si se tuerce, apenas va a existir margen de maniobra.

La incógnita sobre cómo van a responder los jugadores a este panorama nunca vivido está sobre la mesa. El posible riesgo de lesiones, la máxima dificultad para que los equipos alcancen su mejor nivel y la presión psicológica que van a vivir los protagonistas son factores a tener en cuenta. Nadie sabe cómo todo esto va a influir en el rendimiento de los equipos, por lo que tener los cinco sentidos desde el primer momento será fundamental.

En principio, el Alavés es uno de los clubes a los que se les presenta un regreso con menor presión. Instalado en la zona templada de la tabla –es 14º con 32 puntos-, cuenta con una renta de siete puntos sobre el descenso y tiene el average favorable con varios de sus adversarios directos. Sin embargo, bien hará el conjunto de Asier
Garitano en no confiarse, porque las condiciones de urgencia con las que se va a disputar, si finalmente se juega, el tramo final de la temporada, hace que cualquier combinación sea posible.

Preocupación

En una entrevista en Onda Cero, Josean
Querejeta, presidente de Saski
Baskonia, S.A.D., grupo que aglutina la mayoría accionarial en el Deportivo
Alavés, expresó su inquietud por los numerosos interrogantes que preside el plan para lograr la vuelta a la competición. “Estoy muy preocupado, y lo que más me inquieta es la incertidumbre”, admitió. “Aún no tenemos fechas, todos tenemos ganas de que las cosas empiecen, pero no sabemos ni cómo ni cuándo”, asumió. “Predecir cuándo vamos a tener la normalidad de antes es muy difícil de saber”, apuntó.

Esta temporada, de una forma u otra la vamos a pasar, la próxima será muy dura

Pese a todo, se mostró “optimista”. “Creo que saldremos de esta situación”, indicó ante una “crisis económica que va a tener unas consecuencias que van a durar y que las vamos a pagar entre todos”. Auguró problemas a corto y medio plazo. “Esta temporada, de una forma u otra la vamos a pasar, la próxima será muy dura y espero que, a partir de la 21-22, empecemos a recuperarnos, porque el fútbol tiene la gran ventaja de que los derechos de televisión generan muchísimo dinero”, explicó.

En el apartado deportivo, el directivo abre la puerta a las sorpresas. “Sí, posiblemente las haya, porque todos los equipos van a partir de cero. Después de un período tan largo de inactividad pueden surgir posibles lesiones”, advirtió consciente de que “tampoco hay tanto tiempo para ponerse al cien por cien y, además, los partidos van a ser muy seguidos”.

“Comprende” a los futbolistas

Querejeta se mostró satisfecho del pacto alcanzado con la plantilla albiazul para rebajar sus sueldos. “Lo importante es que al final tenemos un acuerdo”, destacó. Aunque en una negociación cada parte defiende sus intereses, se mostró comprensivo con los futbolistas. “Les entiendo, porque cuando uno nunca ha vivido una situación como esta, en una negociación se producen tensiones”, expuso. “No es fácil asumir que, por causas ajenas a uno mismo, y a todos, por una cuestión de fuerza mayor, se les plantee una reducción de salarios”, trasladó.

Las sociedades anónimas tampoco hemos hecho nada

Quiso dejar claro que esta problemática no tiene responsables concretos y afecta a todas las partes. “Las sociedades anónimas tampoco hemos hecho nada”, remarcó.

Aunque no entró en detalles ni desveló cifras, desmintió las declaraciones realizadas por Edgar
Méndez al canal de televisión mexicano TUDN, en las que el canario afirmaba que el club había propuesto a la plantilla una rebaja “del 28% anual” en sus sueldos. “Eso no es cierto”, trasladó.


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