El escritor Fabrizio Mejía comentó que el verdadero propósito de estos centros educativos era separar a niños de sus padres.
Las autoridades mexicanas deben investigar a profundidad cómo y quién operaba Rainbow Multicultural Garden en México, así como quiénes dieron los permisos en la Secretaría de Educación Pública (SEP) para que este kínder funcionara, afirmaron expertos en Mesa De Análisis.
Este viernes Aristegui Noticias dio a conocer la existencia un kínder que opera bajo la filosofía Keith Raniere, el líder de Nxivm quien fue declarado culpable de cargos como tráfico sexual, fraude, robo de identidad y trabajos forzados por una Corte de Nueva York.
Keith Raniere presumía en su página personal de internet ser el creador del programa educativo para niños.
“A fines de 2006, fundó Rainbow Cultural Garden, un programa revolucionario de desarrollo infantil que promueve el potencial cultural, lingüístico, emocional, físico y de resolución de problemas de los niños”, dice su biografía redactada en tercera persona.
Inicialmente el kínder operó en la Ciudad de México mediante una asociación civil encabezada por los hermanos Emiliano y Cecilia Salinas Occeli, hijos del expresidente Carlos Salinas de Gortari.
El nombre comercial del plantel de preescolar que dirigía Cecilia Salinas era Rainbow, pero su razón social era Multicultural Value Development Center y comenzó a funcionar antes de que la SEP le concediera reconocimiento, de acuerdo con documentos oficiales.
Aquí el reportaje completo: Kínder Nxivm: la escuela que Raniere entregó a los hijos de Salinas y Rosa Laura Junco
Al respecto, el escrito Fabrizio Mejía comentó que el verdadero propósito de estos centros educativos era separar a niños de sus padres.
“Me parece gravísimo que la SEP le haya dada permiso a esa escuela, seguramente porque era Cecilia Salinas y la esposa de Federico de la Madrid (Fabiola Sánchez ) las que ponían la cara para este kínder en México por eso se les dio los permisos”, abundó.
La periodista Ana Lilia Pérez consideró que este caso debe obligar a las autoridades mexicanas a hacer una revisión exhaustiva.
“La SEP tiene la obligación de estar revisando, de estar supervisando a las escuelas públicas, las privadas, pero ahora si tienes todos estos componentes que realmente son horizantes, lo que se ha ventilado en los juicios en Estados Unidos, los propios elementos que han aportado las investigaciones periodísticas, las autoridades mexicanas tendrían que estar haciendo sus propias investigaciones“, indicó.
Asimismo, destacó la importancia de “que se revise quiénes aparecen como responsables de ese modelo, incluso de las actas que debe haber de esas escuelas para que la SEP haga un seguimiento sobre si están funcionando bajo otro nombre”.
A continuación la Mesa De Análisis: