El titular de la Profeco, Ricardo Sheffield, desestimó las amenazas recibidas por las estaciones de parte del crimen organizado.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informó que las nueve gasolineras de Nuevo Laredo, Tamaulipas, que fueron clausuradas de manera temporal por negarse a vender combustible a corporaciones de seguridad debido a amenazas del crimen organizado se encuentran ya abiertas al público en general.
La clausura de las estaciones derivó de la queja presentada por el gobierno del estado de Tamaulipas en contra de las gasolineras, las cuales se negaron a vender combustible al Ejército, la Marina y la Policía Estatal, argumentando estar amenazadas por criminales.
En un comunicado, la Profeco detalló que las estaciones retomarán su operación tras comprometerse a eliminar esas “prácticas de discriminación”.
El organismo defensor de los consumidores aclaró que cuatro de las estaciones operan desde la tarde del miércoles y las cinco restantes reanudaron operaciones este jueves.
El miércoles de la semana pasada, el titular de la Profeco, Ricardo Sheffield Padilla, aseguró que las clausuras fueron justas y en estricto apego a la ley, pues “nadie puede ser discriminado”.
Respecto a la posible amenaza a estaciones de servicio por parte del crimen organizado, el funcionario desestimó ese dicho por parte de los propietarios y afirmó que hasta ese momento “no hay una sola denuncia penal” relacionada con esos presuntos hechos.