La primera Junta de Accionistas telemática de la historia se ha saldado con un respaldo total, abrumador, a las propuestas del Consejo que preside Jokin
Aperribay. El 99,65% ha aprobado la ejecución de los acuerdos puestos encima de la mesa. El quórum fue de 100 personas más una externa que han representado a 1.483 accionistas. En total, un 32,66% del capital social.
Los accionistas de la Real han aprobado un presupuesto para el ejercicio 20/21 de 110 millones de euros. Las cuentas de la temporada 19/20 se han cerrado con un superávit de 3,3 millones de euros en plena crisis derivada de la pandemia. El presupuesto se reduce en 7 millones respecto al del curso anterior y la principal fuente de financiación proviene de los derechos televisivos (60%).
Jokin
Aperribay prevé que la Real deje de ingresar alrededor de 20 millones de euros por culpa de la pandemia. “Nuestra tesorería está ordenada”, ha matizado, advirtiendo a su vez de que en enero el club cobrará las cuotas correspondientes a sus abonados en previsión de que el público pueda volver a los campos.
El patrimonio neto de la entidad asciende a 85 millones y los fondos propios tienen un valor de 65. “Nos da mucha solvencia”, reparó al respecto Aperribay. Anunció 50 millones de gasto en el primer equipo, no consta ninguna reducción de ficha de los jugadores en el presupuesto 20/21, en el que se destinarán 1,6 millones a la remodelación de Anoeta. El presidente cifró el número de socios en 35.287, un 90,4% de la capacidad del estadio.
“Para que el fútbol vaya bien, es fundamental que la economía sea solvente”, manifestó Jokin
Aperribay antes de que someter a votación el estado del club. “Tenemos una tesorería ordenada en plena inversión por el campo de fútbol”, insistió, enfatizando la importancia de Zubieta, “un valor de muchísima garantía para afrontar el futuro”.
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