La reunión telemática que ayer mantuvieron Real y Athletic con la Federación Española de cara a la final de Copa del 3 de abril en La
Cartuja apenas arrojó luz en la cuestión fundamental, la referente a la presencia o no de público en las gradas, aunque sea local, para ver el partido. El ente federativo justificó la falta de aclaración al respecto en que es una materia que llevan “altas esferas” y Real y Athletic se marcharon tal y como llegaron a la cita, si bien les quedó claro que no recibirán entradas para la final.
La Federación, eso sí, exigió a ambos clubs que la expedición que desplacen a Sevilla sea muy restringida, lo que de alguna manera supone un problema debido al elevado número de profesionales que hoy en día rodean al primer equipo de la Real. Más allá de los convocados y del amplio cuerpo técnico, analistas, fisios, miembros del departamento de prensa, cocinero, etc… suponen varias decenas de expedicionarios fundamentales que pueden condicionar los planes del club a la hora de completar el grupo que viaje a la final.
Las fechas de la final, en plena Semana
Santa, y el hecho de que la Junta de Andalucía no se posicione oficialmente respecto a su idea para la final podría estar detrás de esta contemporización por parte de la Federación a la hora de comunicar de forma oficial y definitiva si habrá público o no en La Cartuja. Lo que es evidente es que, de haberlo, no viajará de Gipuzkoa. Primero, porque estará prohibido desplazarse y segundo, porque la Real no dispondrá de entradas.
En la reunión se han tratado otras cuestiones de orden logístico, si bien la Real tiene decidido que viajará a Sevilla el viernes, la víspera del partido, y que entrenará en el escenario del encuentro. Las ruedas de prensa oficiales previas al choque también tendrán lugar en La Cartuja.
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