Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol, atendió a los micrófonos de El Larguero de la Cadena Ser tras una jornada maratoniana marcada el aplazamiento de la Eurocopa al verano de 2021 decretado oficialmente por la UEFA. El mandatario también se reunió telemáticamente con los presidentes de las federaciones territoriales y ofreció una rueda de prensa por la tarde en la que garantizó que las competiciones finalizarán según las normas y confirmó que las subvenciones prometidas a los clubes no profesionales serán abonadas.
El presidente cargó especialmente contra la medida de LaLiga de repartir test de coronovirus a los clubes para detectar casos en los jugadores. “Es una medida antipatriota y antisolidaria, hay gente como Lorenzo Sanz que está entre la vida y la muerte y que lo necesita mucho más y los necesitan mucho más porque hay muy pocos test. Es una irresponsabilidad y es incluso sancionable”, aseveró Rubiales.
“La competiciones no se puede reanudar hasta que no haya garantías de salud, queremos acabar antes del 30 de junio pero esa fecha no puede ser un impedimento”, valoró Rubiales en la misma línea que expuso en su comparecencia vespertina. “Queremos acabar, pero no a toda costa, cuando las autoridades nos confirmen que no hay riesgo para salud de nadie, ni aficionados ni futbolistas, sea cuando sea”, insistió el presidente. “Acabar así sería injusto, se acabará con las mismas normas con las que empezó porque llevamos el 70% de la competición disputada”, declaró.
“Los sanitarios son héroes, pero no magos”
“Los problemas con los contratos que acaban el 30 de junio trataremos de resolverlos buscando fórmulas”, apuntó. “Las previsiones que ha hecho la Liga no les competen. Poner todo el empeño en buscar una fecha es un error. Necesitamos una autorización total. No voy a jugar a ser adivino. Los sanitarios son héroes pero no magos. Ahora lo primordial es la salud”, aseguró Rubiales, que insistió en que su deseo es jugar la final de la Copa con las aficiones de Athletic y Real Sociedad. “Solo la haríamos a puerta cerrada si nos obligaran las circunstancias, pero haremos lo que esté en nuestra mano para que estén las aficiones”.
“Desde hace mes y medio se tenían que haber suspendido todos los partidos, a toro pasado es fácil decirlo, pero eso lo sabemos ahora, nadie tenía una bola mágica”, respondió al ser interrogado sobre si se tenía que haber cancelado el viaje del Valencia a Milán, del que ha resultado infectada de coronavirus el 35% de la plantilla ché.
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