Ferrari pasa por un momento delicado. Su SF-23 no ha rendido al nivel esperado en las dos primeras carreras. Ha sido rápido a una vuelta, pero difícil de conducir y sobre todo, con un principal problema: su mal ritmo de carrera en relación a sus competidores, que le hace estar a un mundo de los dominadores, Red Bull, y por detrás de Aston Martin o Mercedes los domingos. Desgastan demasiado las gomas y sufren para encontrar la ventana óptima de uso y comprender todos los compuestos en todo un fin de semana. Para el GP de Australia de F1 2023 de este fin de semana no se espera que la cosa cambie, pero los pilotos de Ferrari, Carlos Sainz y Charles Leclerc, se mostraron confiados en las posibilidades de su coche a medio plazo, seguros de que el equipo italiano logrará revertir su situación y mejorar su base de coche para acercarse a Red Bull.
En ese sentido, ambos dejaron entrever en declaraciones a ‘Sky Sport Italia’ en la previa del GP de Australia de F1 que el equipo está trabajando para reducir la distancia con Red Bull aprovechando el parón que habrá entre este GP de Australia y el próximo de Azerbaiyán.
“Es necesario tener paciencia pero tenemos los medios para mejorar. El coche es verdaderamente difícil, tenemos que encontrar el punto medio entre perder dos décimas en clasificación y 8 décimas en carrera”, dijo Carlos Sainz a la televisión italiana.
“Red Bull no tiene un único punto fuerte. Todo el coche en sí es fuerte”, añadió sobre el monoplaza de Verstappen y Pérez.
“Sabemos dónde está el problema y lo que tenemos que hacer, esa es la parte buena, los números corroboran lo que sentimos, no se va a solucionar en una carrera o un mes, pero tenemos un plan a medio plazo y tenemos una dirección clara que seguir”, apuntó Carlos en ‘DAZN F1’. “Estamos trabajando en los set ups. No podemos estar a 0″2 en clasificación y después 0.8s en carrera. Estamos dándolo todo en la pista y en la fábrica para solucionarlo y confío en el equipo”, añadió el madrileño.
Leclerc cree que luchar por el título es posible
Misma opinión mostró Charles Leclerc. El piloto monegasco admitió que Ferrari ha dado un paso atrás en lugar de mejorar respecto al pasado año y cree que es posible salir del bache actual para pelear por la corona.
“No solo no tenemos el coche del año pasado, sino que hemos ido un poco hacia atrás en cuanto a rendimiento y por lo tanto no puedo decir que vaya a ser fácil ganar. Estoy seguro de que tenemos las armas para hacerlo”, expresó Charles.
El año pasado le quedó claro lo mucho que pueden cambiar las cosas del inicio de curso al final. Empezó con el mejor coche en 2022 y terminó lejos de los Red Bull. Pero la gran diferencia es que el año pasado los coches eran nuevos y el margen de mejora de ambos era mayor al de ahora, ya que el SF-23 es una evolución del monoplaza del curso pasado. Sin embargo, Leclerc no cree que el concepto actual haya llegado a su límite de rendimiento y confía en una mejora.
Carlos Sainz, en el GP de Australia de F1 2023
“Aquí no habrá novedades, pero estamos trabajando para llevarlas después de Australia y volver a estar cerca de los Red Bull. Pero mi objetivo este año no ha cambiado, quiero el Mundial”, apuntó, dejando entrever que las evoluciones llegarán tras el parón que hay desde Melbourne hasta Bakú.
“Red Bull no se trata de los puntos en los que han mejorado. Son mejores en todas las áreas. En todo”, finalizó respecto al gran dominador de este inicio de curso.
El SF-23 tiene mucho por mejorar si quiere acercarse a Red Bull e incluso pelear por los podios