Jorge Sampaoli, entrenador del Sevilla, no quiere ningún tipo de confianza pese al 3-0 que los suyos lograron firmar en el Sánchez Pizjuán ante el PSV. El entrenador argentino volvió a recordar los problemas que tiene en la plantilla y en determinados puestos, como en el centro de la defensa. El técnico desplazó sólo a 16 futbolistas profesionales debido a las bajas y advirtió que la clave estará en pensar en afrontar el partido como si la eliminatoria estuviera igualada.
“Todo pasa por tener el control del balón y del juego. Tenemos que tratar de evitar que juguemos sin balón porque así el equipo sufrirá más los embates del rival. Ya nos dañaron allá los primeros 20 minutos. Es la realidad de lo que pasó, luego nosotros pegamos con los goles y todo cambió”, explicó el argentino, que insistió en que “el contexto de mañana tenemos que llevarlo a favor nuestro”, dijo. “Lo mejor es que el equipo intente jugar de igual a igual, que nos permita imponernos y no ser sometidos”, insistió.
“Si nosotros hacemos un gol modificará los ánimos del rival, y si ellos hacen un gol se sentirán con fuerza. La idea es hacerse mucho con el balón y a través de eso neutralizar los ataques directos del rival, que serán muy importantes, ya lo conocíamos cuando jugamos allá, y aquí intensificarán ese juego”, agregó el preparador de Casilda, que no olvida la Liga y lo que el Sevilla está luchando para salir de abajo. Por eso no piensa ahora mismo en hacer algo grande en la Europa League. “Tenemos una dificultad en la Liga que no se puede esconder y que sigue existiendo. No podemos jugar con especialistas en determinados puestos, también con jugadores que repiten partido o que tienen que jugar antes de recuperarse. En esta situación es muy peligroso y arriesgado decirles que estamos en una situación de jugar con rivales importantes de Europa. Hay otro partido el domingo”.