Saúl Ñíguez, jugador del Atlético de Madrid, analizó el partido que su equipo venció ante el Sevilla, además de celebrar un gol que necesitaba.
“Muy contento por el gol, porque es el primero que le podía dedicar a mi pareja y a la hija que vamos a tener”, comenzó diciendo el futbolista para señalar que le viene bien para recuperar su mejor nivel: “Ayuda como todo, pero lo que cuenta es el trabajo diario, no venirme abajo. También con el trabajo externo al club, que también lo hay, se trabaja no sólo físicamente. Todo ayuda, nada es casualidad. El trabajo paga”, señaló el centrocampista, en palabras en Movistar +.
El jugador hizo una reflexión sobre lo que está viviendo. “Si no lo hemos hablado es porque no le da a la gente desde fuera, el ver cómo se vive desde dentro el fútbol, incluso muchos aficionados, el fútbol no son 11 jugadores y una pelota, eso es mentira. Aquí se siente mucho, lo que pasa el césped se traslada a la familia, a los amigos, a tu relación con el mundo. Es complicado cuando ves que las cosas no te salen. Al final el trabajo paga, no sólo el que veis, que veis a un jugador que no le salen las cosas, que pierde confianza y que al final hay gente que no ayuda mucho. Hay otra que sí y es la que quieres a tu lado y la que valoras”.
En este sentido, insistió: “Hay mucha gente negativa, que no ayuda. Hay otra que te ayuda cuando estás en las buenas o las malas. El otro día una parte del afición vino a darme ánimo en la Ciudad Deportiva y eso marca la diferencia. Hablé con ellos y ahora lo hago público, darles las gracias, seguiré trabajando e intentaré que vuelvan a sentirse orgullosos”.
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