Sergio Rodríguez, jugador de la selección española de baloncesto que disputará los Juegos Olímpicos de Tokio, ha asegurado este jueves que se enfrenta a una de las competiciones más igualadas en las que ha participado, con un formato “durísimo” que les obligará a empezar fuertes desde el primer día ante selecciones de un nivel muy similar al de la actual campeona del mundo.
“Este es uno de los torneos mas parejos en los que he estado nunca, encima por el sistema de competición, el formato es durísimo. Tenemos que empezar muy bien y sabemos que jugamos contra selecciones que están en un nivel muy parecido”, explicó el base tras el entrenamiento del equipo en Saitama, en un pabellón que le trae “muy buenos recuerdos” porque España ganó ahí su primer Mundial.
A su juicio, el equipo llega a Japón “motivado, con mucha ilusión” y convencido de que deberá salir “concentrado y con muchas ganas” como suele hacer para tratar de llegar “lo más lejos posible”, porque ya el primer día se enfrentarán a Japón, anfitriona de los Juegos, en un partido que espera que sea “muy duro”.
También lamentó que tengan que jugar sin el apoyo del público: “Es una pena, a todos nos hubiera encantado ver el pabellón lleno y poder tener a nuestras familias y amigos, pero es lo que hay y somos muy afortunados de poder jugar una Olimpiada, aunque sea en estas condiciones y valoramos lo bonito que es estar en un evento así”, opinó el jugador del Armani Milán.
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