te lo estás cargando y puede acabar fatal

La organización del lavavajillas puede ser un misterio para muchos. Mientras algunos colocan tazas y vasos en la parte superior, otros destinan ese espacio a los cubiertos. Aquí te presentamos una guía para aprovechar al máximo este electrodoméstico y nos centramos además, en algo que debes evitar coloca dentro a toda costa. De hecho, jamás metas esto en el lavavajillas: te lo estás cargando y puede acabar fatal.

Jamás metas esto en el lavavajillas

El lavavajillas es quizás uno de los electrodomésticos de la casa que mejores resultados nos puede dar, siempre y cuando sepamos bien cómo organizarlo o de hecho, dónde va cada cosa y qué utensilios o accesorios de cocina debemos evitar a toda costa.

Según los expertos de Bon Appétit, la zona inferior es ideal para utensilios de mayor tamaño, como platos y tazones grandes (colocados boca abajo para evitar acumulación de agua). Sin embargo, las sartenes son una excepción, ya que es recomendable lavarlas a mano para preservar su revestimiento antiadherente y prevenir la corrosión o oxidación.

¿Por qué deberíamos evitar el lavavajillas para nuestras sartenes?

El tratamiento en el lavavajillas puede dañar su capa antiadherente y propiciar la corrosión y oxidación. De este modo, para prolongar la vida útil de tus sartenes, es mejor abstenerse de meterlas en el lavavajillas. Además, cuchillos afilados, licuadoras, utensilios de procesamiento de alimentos y mandolinas tampoco deberían ser sometidos a este proceso, ya que podrían perder el filo. Evita también incluir elementos de madera, ya que podrían dañarse, al igual que las copas de vino, que corren el riesgo de romperse.

Cómo organizar bien el lavavajillas

En la rejilla superior, coloca tazones pequeños, tazas, vasos y utensilios seguros para lavavajillas, como espátulas y cucharas de silicona. Asegúrate de que sean aptos antes de introducirlos, evitando productos de madera. Recipientes de plástico delgado, como tupperwares, también deben ubicarse en la parte superior para evitar derretimientos. La cubertería debe ir en su compartimiento designado, ya sea en una canasta (con los cuchillos mirando hacia abajo) o en la bandeja de cubiertos, dependiendo del modelo del lavavajillas.

Carga el lavavajillas de forma eficiente

Una vez determinado dónde van los utensilios, es recomendable cargar el lavavajillas de atrás hacia adelante. Esta técnica permite optimizar el espacio y asegura un enjuague completo. Evitarás amontonar la vajilla, garantizando que los chorros de agua alcancen todas las piezas. Coloca los artículos entre los dientes del lavavajillas en lugar de encima de ellos, ya que estos espacios están diseñados para una limpieza efectiva.

Finalmente, presta atención para no bloquear el aspersor superior al colocar la vajilla. Este aspersor distribuye agua caliente y detergente para lavar los platos, por lo que es crucial dejarle suficiente espacio para un movimiento libre y efectivo. Siguiendo estos consejos, podrás aprovechar al máximo tu lavavajillas y mantener tus utensilios en óptimas condiciones durante más tiempo.

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