El récord anterior en París para el mes de julio era de 40.4 grados centígrados registrados en 1947.
El termómetro marcó este jueves por la tarde 42.6 grados centígrados en París, la temperatura más alta registrada hasta ahora, en medio de una ola de calor que condujo a una alerta roja, informó el servicio meteorológico de Francia, Meteo France.
La capital francesa acaba de romper su récord absoluto de calor al registrar 42.6 grados centígrados a las 16:30 hora local en París-Montsouris, indicó el servicio meteorológico.
Meteo France detelló que en gran parte de las ciudades norteñas, incluyendo Calais, Lille y Amiens, también se rompieron récords de temperatura incluso de noche.
El récord anterior en París para el mes de julio era de 40.4 grados centígrados registrados en 1947.
Personas refrescándose en la fuentes del Trocadero frente a la Torre Eiffel para soportar oleada de calor.
“Esto nunca había ocurrido. En estos niveles de temperatura uno debe ser muy cuidadoso“, dijo el primer ministro Edouard Philippe, quien agregó que “con un calor de tal intensidad pedimos vigilancia extrema”.
Se recomendó a las personas resguardarse bajo techo, mantenerse frescas y beber al menos litro y medio de agua para evitar insolación.
Las autoridades activaron un plan de acción para la ola de calor de nivel 3 que incluye establecer “habitaciones frescas” en edificios municipales, abrir piscinas para nadar a altas horas de la noche y dar acceso a los jardines públicos durante la noche para ayudar a las personas a refrescarse.
A finales de junio, un anormal clima caluroso generó temperaturas que batieron récords en la mayoría de las regiones francesas.
En la ciudad sureña de Gallargues-le-Montueux, la temperatura alcanzó los 46 grados centígrados, la más alta registrada. Fue cerca de dos grados mayor que el anterior récord de 44.1 grados registrado en agosto de 2003.
Francia, en donde la temperatura promedio para junio-agosto es de 19.9 grados, registra “olas de calor cada vez más intensas y más frecuentes” debido al cambio climático, advirtió Meteo France.
Para la científica francesa en el área del clima, Valerie Masson-Delmotte, la frecuencia de las olas de calor podría duplicarse para el 2050 a menos que se tomen medidas concretas y urgentes para combatir el calentamiento global.
“Si las emisiones mundiales de invernadero registran una fuerte baja para el 2050, habrá una estabilización. De lo contrario habrá episodios muy prolongados de intensas olas de calor entre mayo y octubre”, advirtió Masson-Delmotte en Twitter.
En 2003, una ola de calor de dos semanas provocó la muerte de cerca de 15 mil personas en Francia y de cerca de 35 mil en toda Europa. (Xinhua)