Los futbolistas despidieron la temporada en el túnel de vestuarios con un asado junto a técnicos, consejeros y empleados
Las dos parrillas de la ‘fiesta’ de despedida de los txuri urdin
Los jugadores de la Real están oficialmente de vacaciones desde las 12 de la noche del domingo. No va a haber más entrenamientos hasta principios de julio y todos tendrán opción de descansar, salvo los pocos internacionales.
De esta manera, los jugadores quisieron despedirse unos de otros el mismo domingo tras el encuentro. Lo hicieron en torno a un asado en el túnel de acceso a vestuarios del Estadio de Anoeta. Allí plantaron dos barbacoas con sendos parrilleros profesionales y camareros para servir los manjares que salieron de la parrilla y de la cocina. El olor a txuleta se percibía casi desde la Avenida de Madrid. Se chuparon los dedos también con las kokotxas.
Aperribay y otros consejeros, empleados de peso como Andoni Iraola, el director de fútbol Roberto Olabe y el entrenador, Imanol Alguacil, también acudieron al convite de despedida en el propio Anoeta que comenzó sobre la una de la mañana, dada la tardía hora del inicio del choque.
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