Joel Embiid está en estado de gracia y volvió a demostrarlo anoche con una actuación sensacional que permitió a Philadelphia 76ers derrotar a los Boston Celtics en el Wells Fargo Center por 117 a 109. La exhibición del camerunés fue suficiente para que los Sixers apabullaran a su rival en el último cuarto y se llevasen el triunfo.
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Embiid volvió a ser el dueño y señor del partido, imparable para los Celtics. El pívot terminó con 42 tantos, 10 rebotes y 2 asistencias en apenas 33 minutos en cancha, y sobre todo dio la sensación de causas estragos en la defensa rival cada vez que el balón pasaba por sus manos.
Lanzó hasta 21 tiros libres, uno más que el equipo de Boston al completo, muestra inequívoca de lo difícil que resultó para los Celtics frenar sus embestidas una y otra vez. Además, terminó con una carta de tiro de 12/19, mostrando nuevamente una efectividad espectacular de cara al aro.
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Los 22 tantos de Tobias Harris, segundo máximo anotador del equipo y que terminó con un +20 en pista, ayudaron a Embiid a llevar el peso de la responsabilidad en un encuentro clave ante un rival directo en la pugna por el liderado del Este.
En los Celtics pesó, nuevamente, la baja de Jayson Tatum. La vuelta de Kemba Walker no fue suficiente para paliar su ausencia, con el base aún limitado en cuestión de tiempo de juego. Walker apenas duró 22 minutos sobre la cancha, en los que aportó 19 tantos y 6 asistencias.
El resto de puntos llegaron de las manos de los habituales, Jaylen Brown y Marcus Smart, pero también de un Daniel Theis que anoche se sumó a la fiesta. Brown anotó 26, mientras que Smart aportó 25 y entre ambos mantuvieron vivos los sueños de Boston mientras pudieron
Lo de Theis sí que resultó sorprendente. El pívot alemán cuajó un gran encuentro y terminó con 23 tantos (10 de 11 en tiros de campo) y 10 rebotes desde el banquillo. Fue el quinto jugador con más minutos de los Celtics pero tampoco pudo evitar el roto que Joel Embiid causó a su equipo.
El encuentro, igualado durante gran parte de su disputa, se rompió por completo llegado el último cuarto. Los Sixers pusieron toda la carne en el asador y asestaron un doloroso parcial de 31-17 a su rival para terminar de cerrar el asunto.
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Con este triunfo los Sixers mejoran su marca como locales a 8-1, la mejor de la liga en este aspecto. Los Celtics, que han sufrido dos partidos suspendidos, se colocan con un 8-5 que les hace perder algo de fuelle en su lucha por liderar la Conferencia Este.
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