Una duda razonable asalta al Athletic

Los leones han retomado los entrenamientos, por ahora de manera individualizada. Pero, si todo va bien, en semanas posteriores y ya en las siguientes fases de la desescalada, podrán trabajar en grupos más numerosos hasta ir recuperando la normalidad.

De esta forma, los jugadores rojiblancos irán progresivamente recuperando la forma perdida durante los casi dos meses de confinamiento. Todo para ponerse a punto de cara a la vuelta de la competición, que en principio podría llegar el fin de semana del 20 de junio, aunque el presidente de LaLiga, Javier Tebas, ha dejado caer que le gustaría que el retorno se pudiera adelantar al 12 de junio.

A falta de que se fije esa fecha definitiva para retomar la Liga, en el horizonte rojiblanco aparece ahora una misión para las once jornadas que restan por disputar. El objetivo a perseguir de los de Gaizka Garitano es tratar de hacerse a la conclusión con la séptima plaza, que daría el pasaporte para jugar durante la próxima temporada en la Europa League sin tener en cuenta la final de Copa, tal y como decidió la pasada semana la UEFA.

El problema es que el reto es de órdago. A falta de 33 puntos por disputar, el Athletic se encuentra con 37 a cinco de ese ansiado puesto de la clasificación, por el que están dispuestos a pelear, además del Valencia que ahora lo ocupa con 42, otros equipos como el Villarreal o el Granada, que tienen 38 puntos.

Y, a pesar de que el calendario que le resta al conjunto bilbaíno no es muy sencillo, a priori tendría el factor cancha a su favor, ya que seis de los partidos que le faltan por disputar en este campeonato se jugarán en San Mamés.

Claro está, eso parecía una ventaja antes del parón por el confinamiento derivado de la crisis del coronavirus. Porque ahora la duda que surge es si el estadio bilbaíno, vacío de público al tener que jugar los partidos a puerta cerrada, podrá ser como antes un elemento decisivo a la hora de empujar a los leones hacia la victoria.

No hay que olvidar que desde que Garitano accedió al banquillo de San Mamés ha sido en la mayor parte de los momentos un fortín que ha catapultado al cuadro bilbaíno.

Valga como dato esclarecedor que de los 25 partidos de Liga que ha disputado el equipo rojiblanco en su feudo con el técnico deriotarra entre la pasada y la actual campaña, 15 han terminado en victoria, 7 han acabado en empate y solo ha encajado 3 derrotas. Es decir, ha sumado casi el 70% de los puntos que ha habido en juego -52 de 75-.

Si en la pasada temporada, los leones sellaron un balance impecable liguero como locales con Garitano, ocho victorias, cuatro empates y ni una sola derrota, en esta campaña los números en casa se han estropeado un poco con la racha de dos empates y dos derrotas consecutivas ante Eibar (0-0), Celta (1-1), Getafe (0-2) y Osasuna (0-1), pero aún así el Athletic lleva siete partidos ganados, tres igualados y tres perdidos.

18 puntos de 33 se juegan en casa

Ahora son 18 los puntos que tendrán la oportunidad de sumar los leones como locales cuando se retome la Liga y podrían ser fundamentales para la consecución de esa deseada séptima plaza.

Lo peor del caso es que para intentar recortar esa distancia de cinco puntos con los puestos europeos, el Athletic deberá salvar una serie de partidos bastante complicados en casa. Así, los de Garitano tendrán que recibir en San Mamés a rivales como Atlético de Madrid, Betis, Mallorca, Real Madrid, Sevilla y Leganés. Todos ellos estarán, a priori, jugándose mucho tanto por la parte alta como por el descenso y, en teoría, vendrán a Bilbao en busca de puntos para lograr su objetivo.

Las visitas tampoco serán sencillas a Eibar, Barcelona, Valencia, Levante y Granada. Hay que hacer especial hincapié en el partido de la 33ª jornada en Mestalla, que podría ser fundamental, ya que el Valencia es ahora el séptimo clasificado y ganó en San Mamés en la primera vuelta (0-1), lo que obligaría a los leones a lograr una victoria concluyente para tener opciones ante los che en caso de empate final en la tabla.

Eso sí, también hay que tener en cuenta que la ausencia de público en estos campos en los que deberá jugar el Athletic podrían jugar como un factor a su favor a la hora de sumar algunos puntos más a domicilio.