“Para Andrés Manuel López Obrador, eso que llaman brecha de oportunidad se está cerrando dramáticamente”, destaca El Financiero.
“Templo Mayor”, en Reforma:
“A lo mejor es por el exceso de chamba, pero los asesores de Hugo López-Gatell no parecen tener información realmente actualizada para enfrentar el coronavirus . Y es que el subsecretario insistió anoche en que México no aplica pruebas rápidas de detección del virus porque supuestamente ninguna autoridad competente del mundo las ha acreditado. Sin embargo, la realidad es muy diferente, ya que en Estados Unidos la farmacéutica Abbot tiene la prueba ID Now que promete resultados en cinco minutos y, lo más importante, cuenta con el visto bueno de la FDA”.
“Frentes Políticos”, en Excélsior:
“Después de que morelenses amenazaron con quemar un hospital si ahí era internado y atendido algún paciente con Covid-19, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación hizo un enérgico llamado a la población a abstenerse de agredir las instalaciones hospitalarias y al personal de salud. Amenazar con destruir las clínicas y hospitales puede constituir un delito y niega el acceso a la atención médica de las personas. No se deben permitir actos de violencia contra el personal de salud ni a las instalaciones hospitalarias que el país necesita para superar con éxito la situación actual. Quien debiera tomar cartas en el asunto, no lo hace. ¿Permitiría el gobernador Cuauhtémoc Blanco una aberración de este tamaño? No contesten”.
“La Feria”, de Salvador Camarena, en El Financiero:
“Para Andrés Manuel López Obrador, eso que llaman brecha de oportunidad se está cerrando dramáticamente. Y si la desaprovecha, no habrá marcha atrás ni en su sexenio, ni en la manera en que su administración pasará a la historia. Su imagen para la posteridad, pero sobre todo el bienestar de decenas de millones de mexicanos, está de por medio, y no hay signos de que el Presidente tenga conciencia de ello. No se necesitan credenciales de experto en economía para advertir que la balanza del gobierno mexicano está al borde del precipicio. La crisis mundial por el cierre de las economías más grandes del planeta, obligadas a atender in-house la pandemia por el Covid-19, no es ningún catarrito, para recordar a la anterior administración que subestimó las consecuencias internas de un descalabro financiero internacional”.
“Trascendió”, en Milenio:
“La Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, encabezada por la morenista Miroslava Sánchez, quedó literalmente pasmada ante la pandemia de Covid-19 y, pese a los acuerdos de los órganos de gobierno en San Lázaro para continuar los trabajos legislativos de manera remota, la presidenta del grupo no contesta mensajes ni llamadas de los integrantes. Tras una semana de buscar sin éxito comunicación con ella, la perredista Frida Esparza instó a reanudar las actividades de la comisión, que por cierto acumula más de 30 puntos de acuerdo con respecto a la emergencia sanitaria por el coronavirus. Eso sí es encerrarse a piedra y lodo”.