El base norteamericano Chris Wright, recién aterrizado en el Casademont Zaragoza, ya trataba a las órdenes de Porfirio Fisac y en su primera comparecencia pública ha prometido “intensidad, liderazgo y presencia” siempre que esté en la pista.
El club anunció su fichaje el pasado sábado tras rescindir la relación contractual con el también base estadounidense Frankie Ferrari.
El jugador, de 33 años, ha dicho que está convencido de que puede “ayudar a dar estabilidad” al club, al que quiere “echar una mano, no enseñar” y que tiene “buenos jugadores”.
Con doce años de competición profesional a sus espaldas, Wright ha reconocido que es el jugador “más veterano” pero que no le faltan las ganas. “Después de un inicio complicado veo al grupo con mentalidad positiva”, ha dicho.
No le costó tomar la decisión de fichar por el Casademont, en tanto en cuanto conoce la ACB y a sus jugadores y por eso jugar en España ha sido una “decisión muy sencilla”.
También ha dicho que cree “firmemente” en su juego y que aunque “obviamente” va a haber errores, espera poder ayudar a ganar partidos.
De hecho, ha asegurado que ya está preparado “para lo que quiere el entrenador” en el partido del próximo sábado, que enfrentará al club zaragozano con el Real Betis Baloncesto en la cancha del equipo sevillano, que afronta “muy ilusionado”.
Fisac, por su parte, ha dicho que le ha pedido que sea el mismo y que aporte su energía cuando esté en la pista.
De momento, debe aprender los sistemas de juego y conocer a sus compañeros, y cree que conforme avancen las semanas va a tener una “buena relación” con el entrenador, que de momento le ha intentado ayudar “en todo lo posible”, ha asegurado.
Wright también tiene ganas de conocer la atmósfera que se vive en el pabellón Príncipe Felipe.