0-1: El Alavés se complica la vida ante Osasuna

R. O. Pancorbo
Gasteiz
Periodista

Se encienden las alarmas en el Alavés. Menos mal que atesora ya 35 puntos y continúa con un buen margen de renta sobre los tres últimos de la tabla. En una nueva exhibición de impotencia en una segunda parte calamitosa, cayó tras un grave error defensivo que le costó el 0-1, marcado por Lato en el minuto 64. Con 26 minutos por delante, el equipo albiazul careció de la más mínima capacidad de reacción y terminó el derbi, muy descafeinado, encerrado en su área.

Sergio
Herrera, portero de Osasuna que fue en su día canterano albiazul, disfrutó de un plácido regreso a Mendizorrotza. Un día más, el Alavés fue incapaz de disparar ni una sola vez con peligro entre los tres palos.

A pesar de los múltiples cambios en el once -un total de siete- efectuados por Asier
Garitano, el conjunto gasteiztarra no mejoró lo suficiente para recuperar su imagen más solvente. Ahora, con siete jornadas por delante, el calendario empieza a complicársele. Atlético
de
Madrid -este sábado- Real
Madrid y F.C. Barcelona serán tres de sus siete rivales para cerrar la competición. menos mal que, con los 35 puntos que ya atesora, sigue teniendo todo a favor para evitar el tan temido descenso.

Bochorno insoportable

El fortísimo calor -el partido arrancó con 31 grados- y el cansancio acumulado por ambos conjuntos con este calendario trepidante, propició una primera mitad para el olvido.

Empezó mejor el Alavés, buscando llegar a la portería rival con balones largos e internadas por banda zurda de un Lucas
Pérez que se ofrecía con codicia a sus compañeros. Botó cuatro saques de esquina el conjunto albiazul en el primer cuarto de hora y tuvo una ocasión clara en el minuto 5, cuando la defensa navarra anduvo lista para desviar a córner un buen centro del punta coruñés con Joselu en boca de gol.

En el diez, se repitió la jugada. De nuevo Lucas
Pérez se fue de su par por la izquierda, pero Lato estuvo más rápido que Borja
Sáinz y se adelantó al albiazul, en inmejorable posición para marcar, para despejar el peligro.

A partir de ahí, nada de nada y mucho sudor por ambos bandos. Osasuna trató de encontrar el faro ofensivo de Rubén
García, pero el Alavés se defendió con mucho orden y sin apuros. Lástima que no tuvo precisión para hilvanar fútbol de ataque. En el 42 pudo marcar Joselu en la más clara de la primera parte, pero su testarazo se fue alto tras adelantarse a su marcador, Lato, y conectar otro buen envío, como no, desde la izquierda.

Tras una aceptable primera parte, todo se torció en la segunda. Osasuna salió mucho más metido y, poco a poco, se fue haciendo con el partido. Tomás
Pina, soporte en el medio campo hasta el descanso, fue acusando el cansancio y los navarros lo aprovecharon para hacerse con el balón. Enfrente, el Alavés, ya sin ideas y muy previsible, basaba su fútbol en imprecisos balones largos imposibles de cazar para Joselu y Lucas
Pérez.

Fallo garrafal

La presión albiazul fue perdiendo gas y su rival lo aprovechó para irse hacia delante. A partir del minuto 60, los visitantes pasaron a dominar por completo un duelo que terminó por convertirse en una agonía alavesista.

Roberto
Torres emergió por la derecha. En el 61, un buen envío suyo fue rematado alto por Aridane. El exalbiazul, sólo en el área, se vio obstaculizado por Enric
Gallego.

No perdonó Osasuna y aprovechó la ocasión para sentenciar un duelo que atufaba a empate. En el 64, en otro envío largo, Rodrigo
Ely falló por dos veces ante Enric
Gallego. El delantero gallego no pudo controlar bien el cuero con todo a favor, pero Lato llegó desde atrás para fusilar a Fernando
Pacheco, que regresó a la portería.

Lejos de reaccionar, el Alavés se vio a partir del gol sometido por Osasuna. Los navarros pudieron aumentar su renta pero, en el 68, de nuevo Lato, y en el 90, Roberto
Torres, no acertaron en dos clarísimas ocasiones.