57-46: El Valencia asfixia al Gernika y alcanza la final

El Valencia Basket firmó este sábado su primera clasificación para la final de la Copa de la Reina, que acoge como anfitrión, al doblegar en la segunda semifinal del torneo a un Lointek
Gernika al que asfixió con su defensa y desbordó con sus contraataques (57-46).

Salió el Valencia dispuesto a dominar el choque desde la defensa y logró ahogar al equipo vasco hasta incomodar tanto su circulación como casi todos sus tiros. Después, la endiablada rapidez del trío exterior que formaban Cristina Ouviña, Queralt Casas y Rebecca Allen le permitió correr y abrir una primera brecha en el marcador (19-10, m.10).

Obligado a asumir tiros forzados, el Lointek
Gernika no aprovechó tampoco su buen trabajo en el rebote ofensivo y se quedó enganchado en la tela de araña local.

Visto que el partido se le iba, el equipo vasco, con buen criterio, aceleró y un par de triples en carrera, uno de Margaret Roundtree y otro de Angie Bjorklund, le devolvieron al choque, pero no tuvo continuidad porque sólo Nogaye Lo la tuvo.

Recuperó Rubén Burgos a su quinteto inicial y el impulso de Allen y la calma para atacar las defensas alternativas de su rival le permitieron llegar al descanso con el choque controlado. Todo manteniendo una notable defensa (31-24, m.20).

Un par de acciones de Belén
Arrojo en la reanudación parecieron desbrozar el camino del equipo de Gernika pero esa ‘alegría’ se tradujo en una selección de tiro menos trabajada en las siguientes acciones, que el Valencia castigó de forma inmediata con nuevos contraataques.

Con el choque controlado, el Valencia encontró la confianza en el tiro exterior que no había tenido antes y apuntaló su diferencia antes de entrar en el último parcial, con Ouviña y Leticia Romero a los mandos (53-37, m.30).

El conjunto vasco, que acudió al torneo después de tres semanas parados por un brote de COVID 19, quiso forzar un final algo más apretado pero le faltó ‘gasolina’ y también argumentos.

Al Valencia le bastó con dormir el choque para no ver cuestionada su victoria, aunque hizo falta un tiempo muerto de Rubén Burgos para evitar que un par de triples vascos le hicieran dudar.