La espiral negativa en la que vive el Manchester United no tiene visos de fin. Al mal momento deportivo, fuera de la Champions League y situado a media tabla en la clasificación de la Premier, el club inglés ve ahora como también la economía se enfrenta a un golpe: el fin del patrocinio de la camiseta en poco más de un año, en junio de 2021. Chevrolet paga 73,2 millones de euros esta temporada por lucir en la indumentaria de los ‘Diablos Rojos’, pero nadie en Old Trafford, ni fuera de él, espera que vaya a renovar ese acuerdo.
Y es que cuando se firmó el mismo, en 2012, las cifras del acuerdo no tenían precedentes. Unos pagos progresivos (incrementados temporada a temporada) que sumaban un total de 470 millones de euros por 7 temporadas de patrocinio. El Manchester United, dirigido entonces por Sir Alex Ferguson, vivía una etapa destacada, pero el precio pactado con la marca estadounidense de automóviles fue considerado unánimamente como desorbitado. Tanto, que el entonces director global de marketing de Chevrolet, Joel Ewanick, fue despedido tan sólo 48 horas después de anunciar el acuerdo por los jefes de General Motors, empresa matriz de la marca, que no comprendían por qué pagaban 45 ‘kilos’ más por año que Aon, el anterior espónsor, que tenía un acuerdo a razón de 22,5 millones anuales por ocupar el mismo espacio.
Así las cosas, el Manchester United ha empezado a buscar un nuevo patrocinador. En el mercado actual destaca el acuerdo por 55 millones de euros más variables (5 millones por Champions y 1’5 por Liga) que cobra el Barça por Rakuten, el más alto que existe después del de Chevrolet con el equipo inglés. El Manchester City ingresa 51,5 millones de euros al año, mientras que Liverpool, Arsenal o Chelsea están en casi 46. Son los que más ingresan por este concepto en Inglaterra. Difícilmente el Manchester United los alcanzará cuando se les acabe el chollo.
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