El convenio colectivo en el fútbol femenino sigue estancado. Y lejos de resolverse, todo indica que las negociaciones están rotas y las partes más distanciadas que nunca. La última noticia es que este martes por la tarde, en la reunión entre sindicatos y clubs, no se ha alcanzado ningún acuerdo.
El presidente de la AFE, David Aganzo, ya señalaba días atrás que en caso de no alcanzarse un acuerdo, existía la seria posibilidad de que las jugadoras convocaran una huelga para detener la competición de la Primera Iberdrola.
Cabe recordar que el convenio en el fútbol femenino debía entrar en vigor en enero del año 2020 y que trata temas muy urgentes como los horarios laborales de las futbolistas, salario mínimo, ayudas por maternidad y garantía de seguro médico, entre varios asuntos. El caso es que, tras un año de reuniones, no se ha llegado aún a un punto de encuentro.
La nueva cumbre se ha celebrado este martes en el Centro de Estudios Sagardoy y ha durado más de dos horas. La Asociación y los sindicatos Futbolistas ON y UGT han seguido sin acercar posturas.
Sí se ha consensuado que el salario mínimo de las jugadoras podría llegar a los 16.000 euros brutos anuales, con 14 pagas, aunque sigue siendo un punto de desacuerdo el horario de la jornada laboral. La patronal quiere que los clubs se puedan acoger a la media jornada laboral, mientras que los sindicatos quieren que se límite en el 75%.
“En el día de hoy se ha mantenido la decimoquinta reunión de negociación del convenio colectivo del fútbol femenino. En esta reunión se ha vuelto a constatar la dificultad de alcanzar un acuerdo, puesto que los requerimientos de los sindicatos son imposibles de asumir por parte de los clubes sin poner en peligro la viabilidad de la competición”, ha señalado la ACFF en un comunicado.
La amenaza de huelga planea ahora muy seriamente sobre una Primera Iberdrola que debía ser histórica pero que se ha encontrado con muchos problemas.
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