En un tramo de la temporada en el que el Real
Madrid, golpeado duramente por las lesiones, se ha quedado huérfano de sus dos máximos exponentes, Benzema y Sergio
Ramos, sabe que no puede permitirse perder a ningún jugador más.
Por eso, el hecho de Casemiro, uno de los pilares fundamentales que aún le quedan en pie a Zidane, esté a falta de una ver una amarilla en Champions para cumplir ciclo de sanción, asusta.
Y es que si el brasileño ve una cartulina amarilla en el duelo de este miércoles ante el Atalanta (21:00 horas/Movistar Liga de Campeones), no podrá estar disponible para la vuelta del día 16 de marzo.
Un contratiempo que, de terminar dándose, sería altamente preocupante para un entrenador Zidane, que se vería abocado a sustituir a un jugador que se ha convertido en capital esta temporada (es el segundo máximo goleador del equipo) y que, además, no tiene recambio natural más allá de las probaturas que se podrían hacer con Valverde o Kroos o, ya con más riesgo, dando cabida en el once al canterano Antonio
Blanco, un jugador con mucho potencial pero falto de experiencia.
Episodio Ramos en la retina
Esta circunstancia con Casemiro recuerda además al episodio acontecido hace ya dos temporadas, en la misma eliminatoria de octavos ante el Ajax, en la que Ramos se ‘borro’ del partido de vuelta al ver una amarilla en la ida, en Ámsterdam, pensando que la eliminatoria se resolvería sin problemas en Madrid.
Finalmente el Ajax pasó por encima de los blancos y el capitán, presente en el palco, no volvió a jugar en Europa aquella temporada.
ENCUESTA MD: “¿Ves al Atalanta capaz de golear al Real Madrid
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