La Real planea dotar de consideración de crack a Alexander
Isak en el nuevo contrato que pretende que firme este verano. La intención de la Real es poder apalabrar un acuerdo con el delantero sueco antes de la Eurocopa, para poder firmarlo y hacerlo oficial cuando comience los entrenamientos en julio. La intención es que firme el contrato más largo en la plantilla -que ahora lo tiene Carlos
Fernández hasta 2027-, elevar su cláusula, conscientes de que no se va a poder ir mucho más allá de los 70 millones de euros actuales y colocarle en el primer rango en la escala salarial, junto a Oyarzabal, Silva y Merino.
En el club son optimistas con el éxito de la operación, con el O.K. final del jugador aunque éste públicamente nunca cierra la puerta a nada, y con que el Borussia Dortmund no ejerza su opción de recompra de 30 millones. Puede hacerlo este verano y en el de 2022, pero Isak no quiere ni oír hablar de volver al club alemán.
No esperan al Borussia Dortmund
La tranquilidad en este sentido también se basa en la posibilidad cada vez más acusada de que el Dortmund se quede con Haaland en el presente mercado: “¿El Borussia Dortmund dice que me quedaré al 100% este verano? Tengo un contrato con el BVB, así que seré respetuoso”, dijo ayer el fenómeno noruego.
Imanol cuenta con Isak, Carlos
Fernández y Bautista para la próxima temporada, pero consideran al sueco el factor diferencial y el elemento clave. Descartado el Dortmund, en la Real creen que, dada la actual tesitura, es muy difícil que algún club venga con los 70 millones de euros que cuesta su libertad. Si eso sucediera, la Real no buscaría otro ariete si volviera Willian
José. Si el Wolverhampton no ejerce la opción de compra sobre el brasileño, la Real se embolsaría entre tres y cuatro millones de indemnización y pondría al de Porto Calvo en el mercado, salvo que Isak fuera traspasado. El ariete, con contrato en la Real hasta 2024, está tasado en 20 millones de euros.
Primer amistoso
Isak disputa hoy con su selección el primer amistoso de preparación de la Eurocopa. Es ante Finlandia y se disputa a las 18 horas en el Friends Arena de Solna, la ciudad de nacimiento del realista.
POSIBLE ‘OVERBOOKING’ EN LA DELANTERA
Fernández, la gran apuesta de Olabe
La Real abonó 10 millones de euros, una cantidad estratosférica en los tiempos que corren, en el pasado mes de enero por Carlos
Fernández, que firmó un contrato hasta 2027. El punta sevillano ha dejado destellos de su nivel, pero varias lesiones le han impedido exhibir todo su potencial. En medio año, disputó 13 encuentros, entre ellos la final de la Copa del Rey, en los que anotó un gol y dio dos asistencias. Es la gran apuesta de Olabe .
Quedarse con Willian José, opción si fichan a Isak
La Real está a la espera de que el Wolverhampton le confirme que no hará efectiva la opción de compra de 25 millones de euros que se reservó por Willian
José, cuyo rendimiento no fue el esperado en Inglaterra. Es, a priori, un gran problema para el club, que esperaba recaudar en torno a 17 millones por él (ya que tiene el 70% de sus derechos). Pero la Real contempla quedarse con el brasileño en el improbable caso de que un club abone los 70 millones de la cláusula de Isak.
La eterna incógnita con Jon Bautista
Jon
Bautista tiene contrato hasta 2023 y, en principio, continuará. Pero, una temporada más, y como afirmó en MD, “esperaba jugar más”, por lo que su futuro, con dos arietes que parten con más opciones de partida, es una incógnita. Imanol valora tenerle en la recámara, pero no cuenta con él de inicio. El de Errenteria disputó 27 partidos, buena cifra, pero en ninguno fue titular. En total fueron 461 minutos, 17 minutos por choque.
Karrikaburu, presto a reventar la puerta
Hay retenciones en el puesto de ‘9’ del primer equipo de la Real, pero hay jóvenes que están dispuestos a romper el cascarón y tumbar la puerta a cabezazos. Es el caso de Julen
Lobete y también de la gran esperanza de la cantera realista, Jon
Karrikaburu, el gigante de Elizondo de 18 años. La Segunda División debe ser una inmejorable lanzadera para sus primeras incursiones en una elite que le espera.
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