Cuidado con las uñas postizas, aquellas que simplemente se aplican con un poco de pegamento a presión como las que venden en tiendas incluso de ropa, ya que pueden ser peligrosas para la salud de las uñas si solemos recurrir a ellas a menudo.
Uñas postizas: ¿cuáles son los riesgos para tus manos?
Tener una manicura perfecta no es fácil. Por esta razón, muchas personas deciden confiar en las uñas postizas, que se adhieren rápidamente a la uña real y siempre se ven frescas como si acabáramos de salir de un centro de uñas o de estética. Solo hay un pequeño problema. Las uñas a presión no están exactamente «libres de riesgos». La extracción incorrecta de los de la uña cuando nos las queremos quitar puede provocar el que acabemos con parte de nuestra uña natural arrancada o también, que suframos de descamación.
Por ello, se suele recomendar como forma más segura para quitar las uñas postizas, el sumergirlas en acetona, que disolverá el pegamento que tienen este tipo de uñas y que (todo hay que decirlo) suele ser «extra» fuerte.
Por otro lado, en el caso de que te preocupe que la propia acetona pueda acabar resecando tu piel, puedes sumergir las uñas en el agua o usar el lado en ángulo de un palo de madera de naranja para quitar las uñas. Lo único que tienes que hacer es deslizar el palito suavemente debajo de la superficie, alternando de un lado a otro de la uña para aflojar la unión en ambos lados. Debería romperse y desprenderse, pero si no lo hace, no lo fuerces.
Otra cosa importante para evitar complicaciones : las uñas postizas pueden durar hasta un par de semanas, pero eso no significa que tengas que sustituirlas por otras cada 15 días. Debes tomar descansos largos y dejar que tu uña natural respire. Desafortunadamente, las infecciones suelen ocurrir debajo de la uña fértil, provocando que las bacterias y los hongos proliferen fácilmente debido a la humedad. Siempre que el agua quede atrapada entre tu uña natural y una uña postiza (por ejemplo, cuando te lavas las manos), estás poniendo en riesgo la salud de tus uñas.
También existe otro riesgo: el pegamento también podría provocar reacciones alérgicas . El consejo es aplicar una cantidad adecuada, que suele ser similar a la de una gota, solo en las uñas y evitar que toque la piel alrededor de la uña que es donde suelen manifestarse más reacciones.
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