El Athletic volvió a los tres centrales en un equipo en el que
Garitano
sorprendió dejando a Raúl García en el banquillo
y sacando a
Villalibre
, que cuajó un buen partido. El once que presentaron los leones, a partir de ahí, obedeció a lo previsto.
Herrerín
en portería; con
Yeray, Núñez e Iñigo
Martínez
en el centro y
Capa
y
Yuri
en los carriles;
Dani
García
y
Vesga
en la medular con
Muniain
de media punta y
Williams
y el citado Villalibre arriba. El Espanyol fue fiel al tradicional 1-4-4-2 de
Abelardo
con dos de sus últimos fichajes,
Cabrera
y
Raúl
de
Tomás
, estrenándose de partida ante su afición.
El Athletic salió mandón, imponiéndose a su rival en la mayoría de las acciones defensivas, con los centrales y Dani
García
rindiendo a un muy alto nivel y dos carrileros que se están mostrando como jugadores muy importantes en la faceta ofensiva de los rojiblancos. Tanto Capa como Yuri
llevan dos goles cada uno y varias asistencias de gol en la presente campaña, números poco habituales para tratarse de laterales. Muniain, por su parte, arrancó muy participativo y dos puntas con mucho nervio.
Villalibre ejecutó pronto una gran jugada de laboratorio en una acción a balón parado y firmó su primer gol en Liga como rojiblanco. Los locales apenas tuvieron oportunidades. Iñigo y Núñez se encargaron de frenar los intentos de Calleri y Raúl de Tomás. Yuri y Villalibre
rozaron el segundo antes del descanso.
El Espanyol adelantó líneas en el segundo tiempo e inició mejor que en los primeros 45 minutos, pero el Athletic demostró el gran momento de forma de sus dos carrileros, auténticos puñales, en este sistema de tres centrales. Ambos fueron un auténtico quebradero de cabeza para
Víctor
Sánchez
y
Didac
. Abelardo, en tal tesitura, introdujo
al recién llegado
Embarba
en sustitución de
Melendo
y puso toda su artillería, tres fichajes navideños incluidos, en el terreno de juego. Más tarde quitó a Víctor Sánchez y sacó a Lluis López
.
Los dos equipos dudaron de si arriesgar para ir a por el partido o conformarse con el punto
A falta de poco menos de media hora para la conclusión del choque, Villalibre
tuvo una buena ocasión para firmar el 0-2; pero fue Raúl
de
Tomás, tras un balón ganado por Calleri en el área rojiblanca, quien empató y demostró el porqué de su fichaje.
El cambio de Raúl
García
por
Williams resultó significativo. El de
Beñat
por
Muniain, al borde del 80, también. A partir de ahí el partido entró en una fase de alternancia en ambas direcciones. Los dos equipos dudaron de si arriesgar para ir a por el partido o conformarse con el punto. Quinto empate consecutivo en Liga, en definitiva, para un Athletic que mereció más, sobre todo a lo largo del primer tiempo. A destacar, en especial, la gran actuación del joven delantero Asier Villalibre.
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