El Elche supera las expectativas creadas en el inicio de la temporada de su regreso a Primera División, ya que el equipo ilicitano, todavía con dos partidos pendientes, se ha instalado en la zona media de la clasificación con doce puntos a pesar de las circunstancias especiales que rodearon su planificación deportiva.
El Elche, situado cuatro puntos por delante del descenso tras ocho partidos disputados, certificó su ascenso a Primera a finales de agosto, por lo que tuvo que rehacer su plantilla en apenas dos semanas para la nueva competición.
De las catorce incorporaciones, seis llegaron en las últimas veinticuatro horas de mercado, ya con tres jornadas de Liga disputadas, por lo que el entrenador, Jorge Almirón, que debutaba en el club y en la liga española, tuvo que apoyarse en la columna vertebral del pasado curso, reforzada por varios jugadores fichados de Segunda y sin experiencia en Primera, como Raúl Guti o Tete Morante.
¿Qué nota le pondrías al Elche en lo que va de curso?
El equipo ilicitano ha cimentado su buen arranque en la seguridad defensiva al lograr mantener en tres partidos la portería a cero, y en su efectividad cara a portería, ya que es uno de los conjuntos que menos ocasiones necesita para marcar.
Tras un mal arranque ante la Real Sociedad (0-3), el Elche comenzó a hacerse fuerte como visitante, donde ha logrado sus mejores registros. Venció en Eibar (0-1) y Vitoria (0-2), además de empatar recientemente ante el Levante.
Todos estos resultados tienen un enorme valor al tratarse de marcadores positivos ante conjuntos que, en teoría, pueden ser rivales directos por la permanencia.
Como local, el Elche solo ha logrado un triunfo, ante el Valencia (2-1), pero supo resistir y empatar ante Huesca (0-0) y Celta de Vigo (1-1), rivales que por momentos le superaron en varias fases del juego.
Además de su notable puntuación, pese a tener dos partidos menos, que la mayoría de sus rivales, la gran sorpresa positiva del Elche en estos primeros meses del campeonato está siendo el rendimiento de jugadores sin experiencia en Primera, como el portero Edgar Badia, Pere Milla, Fidel Chaves, el central Gonzalo Verdú o Josan Ferrández, pilares básicos del equipo de Almirón.
Estos dos últimos jugadores fueron incluso piezas clave en el equipo que hace tres temporadas militó en Segunda B.
El técnico argentino, consciente de las limitaciones de su plantilla, optó por proteger al equipo defensivamente con un sistema de tres centrales, sacrificando incluso su filosofía futbolística, mucho más ofensiva, para reforzar con puntos la confianza de su equipo, aunque ante el Levante jugó con una línea de cuatro.
El Elche ha pasado de ser “el favorito para el descenso”, como reconoció públicamente Pere Milla, delantero del equipo, en alusión al escaso presupuesto del club, el más bajo de Primera, a ser una de las revelaciones.
Sin embargo, plantilla y entorno mantienen los pies en el suelo, sobre todo ante el exigente calendario que se avecina en el próximo mes y medio, en el que deberá medirse a todos los grandes.
También existe un moderado optimismo ante la sospecha de que según avancen las jornadas los fichajes de más nombre, como Emiliano Rigoni, Iván Marcone o Guido Carrillo, ayuden al equipo a dar un salto de calidad mayor que encarrile el camino a la salvación.
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