Chase Merriweather, un pequeño deportista y jugador de baloncesto de 12 años que perdió las manos y las piernas por culpa de una enfermedad, recibió un par de sorpresas mayúsculas durante el fin de semana de las estrellas de Salt Lake City. La primera fue la invitación para asistir al All Star de la NBA, y la segunda fue conocer a Luka Doncic en persona y acompañarle en el entrenamiento previo y durante el partido de las estrellas.
El astro esloveno conoció la historia del chaval y quiso colaborar para que disfrutara de una experiencia única en Utah. Además de sorprenderle con su visita, le regaló un montón de ropa y merchandising de la NBA, los Dallas Mavericks y hasta una camiseta suya firmada en persona. Luego le invitó a acompañarle al All Star Game y al entrenamiento previo junto al resto de estrellas de la liga.
“Esto es lo más increíble que me ha pasado nunca”, comentó Chase en un vídeo de su experiencia recopilado por Isaiah Garza. Un gesto precioso de Doncic y todo un ejemplo de superación el del joven Merriweather, que a pesar de perder sus extremidades a los 3 años vive una vida plena llena de actividad física.