El reto de Manu García para 2020


Con cada inicio de año, todos nos marcamos una serie de metas y promesas que muy pocas veces cumplimos. En este arranque de 2020, Manu García afronta una muy especial. Tal y como se recogió en la última ampliación de su actual contrato, que concluye el próximo 30 de junio, lo prorrogará de forma automática por una campaña más si disputa un mínimo de 45 minutos en 25 encuentros de la actual Liga.



Hasta la fecha, el capitán babazorro lleva este reto bien encaminado.
Transcurridas 18 jornadas del torneo de la regularidad, acumula ya 13 encuentros con un mínimo de 45 minutos
, con lo que ha rebasado la mitad de los partidos exigidos para alargar su vínculo.

A la espera de cómo quede la definitiva plantilla albiazul con los fichajes que puedan llegar en enero -la prioridad es reforzar el centro del campo-, el gasteiztarra se ha convertido por ahora en uno de los fijos para Asier Garitano. Ha tomado parte en 16 partidos -en 13 ha sido titular- y totaliza 1.101 minutos de juego en esta Liga, siendo el octavo jugador más utilizado y uno de los diez que ya ha rebasado la barrera de los 1.000 minutos.

Dos sanciones

De hecho, ha jugado siempre que ha estado disponible, ya que por ahora sólo se ha perdido dos encuentros por suspensión federativa. No disputó el choque frente al Mallorca en la séptima jornada tras ser expulsado por doble amarilla frente a la Real Sociedad, ni el derbi de Ipurua ante el Eibar, tras ver completar su ciclo de cinco tarjetas ante el Valladolid. Hasta ahora ha visto 8 cartulinas, la doble de Donosti y seis más.

De los 13 envites en los que ha sido titular, ha completado nueve, siendo sustituido en otros cuatro. Además, ha salido desde el banquillo en tres ocasiones -una precisamente en Donosti, donde fue expulsado al ver su segunda amarilla en una acción que el colegiado sancionó con un más que discutible penalti, y las otras dos contra el Sevilla (31 minutos) en la 4ª jornada y frente al Real Madrid (9) en la 15ª.

En su octava temporada como albiazul, el centrocampista sigue siendo un líder del equipo dentro y fuera del campo, siendo junto a Laguardia y Fernando Pacheco uno de los tres supervivientes en la actual plantilla del equipo que consiguió el ascenso a Primera División en la temporada 15-16.

Siempre protagonista

Con 33 años, en abril cumplirá 34, se encuentra en plena madurez deportiva. Es el segundo pivote más utilizado por Asier Garitano por detrás de Wakaso, que suma 1.200 minutos repartidos en 15 encuentros, con 14 de ellos como titular.

Detrás de ambos se sitúan Tomás Pina, lesionado hasta abril, con 13 partidos -12 como titular- y 901 minutos, Pere Pons, con 16 duelos -5 como titular- y 641 minutos. Cierra el quinteto Javi Muñoz, que sólo ha jugado en el Camp Nou, donde se estrenó con el Alavés en Primera División jugando 53 minutos.

Desde su llegada a El Glorioso,
el capitán babazorro ha estado siempre presente en los grandes momentos del equipo
. Fue pieza clave en los ascensos a Segunda A, en la 12-13, y a Primera División, en la 15-16. También disputó 81 minutos en el histórico triunfo logrado en Jaén en la última jornada de la 14-15 (2-3), que sirvió para certificar en los últimos segundos ligueros una permanencia agónica, y en la final de Copa del 27 de mayo de 2017, donde disputó los 90 minutos de la derrota frente al F.C. Barcelona (3-1).


Source link