Ferrari lo ha vuelto a hacer. Después de tener bastantes problemas de set up el viernes, en unas horas, transformó su coche mediante los ajustes para plantarlo en pista este sábado y avisar a Mercedes de su potencial. Son conscientes de que los de la estrella son superiores en ritmo de carrera, por lo que los italianos deberán quemar todos sus cartuchos a una vuelta en clasificación para buscar la sorpresa en casa del líder del Mundial, Lewis Hamilton. Así, en menos de un día hemos pasado de ver a un Vettel perdido y nada cómodo, a estar contento con los cambios realizados en su coche, algo que le permitió finalizar segundo a solo 26 milésimas de un Leclerc que parece tener algo más que el alemán en este trazado. El viernes, el monegasco se presentaba como la única amenza para los Mercedes y este sábado, el joven ferrarista fue el más rápido de la sesión por delante de Vettel y dejando a 49 milésimas a Hamilton.
Todo ello, en una sesión que fue algo extraña debido a las gotas de lluvia que cayeron al inicio. Solo un aviso de lo que podría suceder en clasificación, aunque la probabilidad de que el agua bañe la ‘qualy’ no sea muy grande. A medida que fueron avanzando los minutos, la pista se secó y mejoró, lo que permitió a todos los pilotos realizar sus simulaciones de clasificación. En ellas, quedó claro el gran paso al frente de Ferrari y que la pole podría estar muy reñida con las ‘flechas de plata’, aunque cabe recordar que Mercedes siempre se guarda un extra de potencia para el momento decisivo de Q3, algo que puede marcar la diferencia.
Otra de las conclusiones fue que Red Bull parece no estar a la altura de la pelea por la primera plaza de parrilla, con Gasly finalizando en la cuarta plaza a 0”213 de Leclerc y Verstappen, que no pudo hacer una buena vuelta, terminando a medio segundo en la quinta plaza. Ambos pudieron superar a un Bottas que no puede permitirse seguir perdiendo puntos respecto a Hamilton, acabando poco a poco con sus opciones de seguir soñando con un título que se le va escapando. En ese contexto de presión, las sensaciones del finlandés no fueron buenas en la FP3. Se le vio deslizando demasiado y batallando contra su propio monoplaza para mantenerse en pista y acabó la sesión en la sexta plaza, a 0”551 de Charles.
La Q3, tremendamente reñida
Por detrás, Norris, con una buena última vuelta, volvió a demostrar el potencial del McLaren, quedándose a unas 7 décimas del mejor, cada vez más asentado con las mejoras en los bargeboards que ya probó el viernes. No así Carlos Sainz, que este sábado montó por primera vez estas evoluciones en una pista que no era la mejor para poder probar los límites del coche con dichos cambios. Así, el español terminó en la 12ª posición a medio segundo de su compañero, quedando claro así que cuenta con mucho margen de mejora de cara a la clasificación en una zona media que está tremendamente apretada. Tanto es así que del octavo clasificado (Hülkenberg), hasta el 14º (Grosjean), la brecha fue de tan solo 2 décimas, por lo que la Q3 estará muy pero que muy cara para todos los aspirantes de la ‘Segunda División’.
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