‘Todo lo que digas, se puede volver en tu contra’, se suele decir. Y en la Fórmula 1, es algo que suele pasar muy a menudo. Los pilotos siempre defienden sus intereses y los de su equipo, aunque siempre lo hacen midiendo muchísimo sus palabras. Pero en un deporte en el que los protagonistas hacen tantas declaraciones antes, durante y después del Gran Premio, es imposible acordarse de todo. Eso es lo que le debió pasar a Lewis Hamilton al término del GP de Gran Bretaña, cuando defendía su posición en el accidente que protagonizó ante Verstappen, asegurando además que el hecho de que Max hubiera acabado en el hospital no desvirtuaba su victoria. No recordaba que hace años, en el GP de Francia de 2018, precisamente él se quejó de forma contundente de lo mismo que el propio Hamilton hizo en Silverstone, que fue salir beneficiado de un accidente que él mismo provocó.
El portal ‘caranddriver.com’ fue el que, tirando de hemeroteca, encontró las palabras de Lewis Hamilton de aquel Gran Premio de Francia. Allí, Hamilton salía en la primera posición y no tuvo oposición. Por detrás, Bottas (2º en la parrilla) y Vettel (3º), salían con mejores gomas y podían complicarle las cosas. Pero en la primera vuelta, Sebastian se pasó de frenada, se llevó puesto a Bottas y todo cambió. Valtteri tuvo muchos daños que reparar en boxes, mientras que Vettel solo dañó el alerón. Ello permitió a los dos reparar su coche en boxes y salir de nuevo a la carrera, pero Valtteri perdió más tiempo, y así, el alemán quedaría 5º mientras que el nórdico acabaría 7º. Todo ello, después de que Vettel fuera sancionado con 5 segundos, algo que no le impidió terminar por delante de Bottas.
Tras la carrera, en Mercedes estaban indignados. “No entiendo la sanción. Es demasiado poco. Le podrían haber sancionado con algo más. Destrozó su carrera y la de Bottas”, decía Niki Lauda.
Pero Hamilton se mostraba aún más enfadado: “Alguien destroza tu carrera y solo le das una palmadita. No tendría que poder volver y terminar delante”, dijo. Vaya, precisamente lo que sucedió 3 años después, en el GP de Gran Bretaña de Fórmula 1.
Hamilton fue considerado “predominantemente culpable” en su accidente con Verstappen, pero mientras Max tenía que abandonar, él se benefició de la bandera roja que el propio Lewis originó con dicho incidente para poder reparar su coche y salir a la carrera. Le impusieron una sanción de 10 segundos, pero con un coche superior, ganó a Leclerc y logró el triunfo. ¿No es eso lo que Hamilton definía como una “palmadita” en 2018?
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