El alero Tobias Harris mantuvo su condición de nuevo All-Star dentro de los Sixers de Filadelfia y con 30 puntos los guió al sexto triunfo consecutivo tras imponerse por 99-96 a los Knicks de Nueva York.
Harris, que ha suplido a la perfección la ausencia del pívot estrella de los Sixers, el camerunés Joel Embiid, baja por dos semanas por lesión, también aportó seis rebotes, dos asistencias, recuperó un balón y puso dos tapones.
Por su parte, el escolta Seth Curry se encargó de dominar en los tiros desde fuera del perímetro, lo que le permitió aportar 20 puntos, incluidos cuatro triples de siete intentos de triples.
Los Sixers (28-12) mantuvieron su control sobre la posición de la Conferencia Este, en gran parte porque Harris se inspiró en los minutos finales. Anotó siete puntos seguidos, incluida la canasta del empate y una bandeja que les dio la ventaja con parcial de 96-92.
Luego abandonó el campo al grito de “¡Soy un All-Star!” Harris creía que debería haberse unido en el Partido de las Estrellas a sus compañeros de equipo Joel Embiid y el base australiano Ben Simmons, quien concluyó el partido ante los Knicks con un doble-doble de 16 puntos y 13 rebotes -10 defensivos-, y siete asistencias.
Quien sí estuvo en la 70 edición del Partido de las Estrellas, que se disputó el pasado 7 de marzo en Atlanta, fue el ala-pívot Julius Randle, que lo hizo por primera vez, y ante los Sixers acabó como líder de los Knicks al conseguir un doble-doble de 19 puntos y 16 rebotes.
Su compañero de equipo, el alero canadiense RJ Barrett, llegó a los 17 tantos, pero tampoco fueron suficientes a la hora de evitar la segunda derrota consecutiva en dos noches seguidas de los Knicks.
La noche anterior, los Knicks habían jugado en el Barclays Center de Brooklyn (Nueva York) contra sus vecinos de los Nets, que se impusieron por 117-112.
La derrota dejó a los Knicks con una marca global perdedora de 20-21, pero en el octavo puesto de la Conferencia Este.
Los Sixers, sin Embiid, habían ganado los tres encuentros desde el receso del Partido de las Estrellas por al menos 22 puntos, pero ante los Knicks les tocó trabajar más duro.
Los reservas de los Sixers los destacaron en el cuarto periodo gracias al escolta Matisse Thybulle y el alero turco Furkan Korkmaz, que consiguieron triples consecutivos, lo que permitió al equipo de Filadelfia reducir la desventaja a cuatro tantos (83-87) y se mantuvieron en el campo cuando Simmons y Harris regresaron a la acción.
El veterano pívot Dwight Howard mantuvo la diferencia de cuatro puntos al hacer un tapón limpio en la penetración de Randle, y Simmons anotó canastas consecutivas que dejaron el parcial en 87-89 hasta que Seth Curry, con un triple, les dio la ventaja de 90-89 y 5:01 minutos por jugarse.
Los Knicks consiguieron empatar a 92 a 3:18 minutos del final, pero Harris puso el parcial de 94-92 y los Sixers ya no dejaron escapar la ventaja para asegurarse la victoria.
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