Existe el riesgo de que la final de Copa
del
3
de
abril ciegue la mirada de la Real. Que no le permita ver con claridad que hay vida más allá de la madre de todas las batallas, del derbi más importante de la historia. En plena cuenta atrás hacia La Cartuja, el peligro de no prestar atención a los pequeños detalles diarios es incuestionable. Y en ese contexto deben gestionar Imanol y sus jugadores la llegada a Anoeta del Levante (18.30 horas, Movistar LaLiga) que, por mucho que llegue desgastado y tocado anímicamente tras su esfuerzo copero del jueves, no es la mejor noticia. Ante un rival duro por antonomasia para los txuri
urdin en su estadio, la escuadra guipuzcoana afronta, sin embargo, una jornada decisiva en su objetivo de lograr por segunda temporada consecutiva el pasaporte hacia Europa vía Liga. Todo pasa por ganar hoy.
La derrota el viernes del Villarreal convierte el choque de esta tarde en trascendental. Si gana la Real, abrirá una brecha de ocho puntos sobre el séptimo clasificado, un paso de gigante en pos del objetivo de terminar el campeonato entre los seis primeros. Tres partidos de ventaja, más el goal
average, sobre los de Emery con 12 encuentros por disputarse comenzaría a ser una ventaja casi definitiva. El Sevilla, además, también cayó ayer de forma inesperada en el campo del Elche, por lo que una victoria dejaría a la Real a tres puntos de la Champions, aunque los de Lopetegui tienen un partidos menos. El triunfo, por último, también supondría mantener a raya al Betis, que juega mañana contra el Alavés y que, a tres puntos de los txuri urdin, sueña con asaltar la quinta plaza.
Vuelven Illarra y Mikel Merino
El Levante es un equipo que se le atraganta a la Real en Anoeta. Los txuri urdin sólo han ganado tres de sus once enfrentamientos en Primera ante los valencianos en casa, un precedente que obliga a jugar el partido de hoy con los cinco sentidos. Por mucho que, como admitió Imanol, la Real cuente con la ventaja objetiva de estar más fresca ya que ha podido preparar el partido toda la semana y el Levante se pegó una paliza de 120 minutos ante el Athletic hace sólo 72 horas.
La Real, además, recupera a Merino e Illarra para el choque de hoy y, pese a tener las bajas ya conocidas de Elustondo, Moyá, Sangalli y Zaldua, podrá alinear un ‘once’ casi de gala. Los únicos cambios que se esperan respecto al equipo que igualó el lunes en Valdebebas son el ingreso de Illarramendi y Merino en la medular, en detrimento de Guevara y Zubimendi. El Levante, además, une a su cansancio las bajas de jugadores importantes como Melero, Campaña, Postigo o Rober
Pier por lo que Paco
López planteará un partido largo, de ritmo bajo, parapetado más que probablemente en una defensa de cinco.
La final de Copa de dentro de cuatro semanas irá eclipsando todo en el entorno de la Real pero hay vida más allá de la gran batalla ante el Athletic. Partidos como el de hoy, en el que se puede dar un paso de gigante hacia Europa, lo demuestra.
Source link