Joel Robles fue el gran artífice del triunfo bético ante Osasuna, pues el meta madrileño realizó un total de cinco paradas, tres de ellas absolutamente decisivas, ya que evitó tres goles cantados de Jonathan Calleri, dos en la primera parte y otro al comienzo de la segunda, todavía con 0-0 en el marcador. “Son tres puntos importantes. Cada partido es un mundo. Osasuna lo estaba haciendo muy bien. Es un equipo muy rocoso. Estaban muy pendientes, pero sabíamos que íbamos a tener alguna y así ha sido. Hay que engancharse a este momento bonito, positivo, pero con mucha humildad. Es importante generar esa positividad para seguir luchando”, resaltó el guardameta tras el partido.
Joel también se refirió al calendario tan apretado, pensando ya en el partido de Copa del próximo jueves ante el Athletic, con el pase a semifinales en juego: “Cada jornada es un partido complicado, al final hay que enchufarla. Desde la humildad y el trabajo, y jornada a jornada. Déjanos descansar hoy y ya mañana pensaremos en el partido del Athletic. Nada, a por todas el jueves. Yo para ayudar al equipo nadie me regala nada. Yo trabajo y cuando el míster me llama intento estar lo mejor posible”.
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