Aitor
Elizegi y su Junta Directiva se vuelven a examinar en la Asamblea Extraordinaria que dará comienzo a las diez de mañana en San Mamés. Los compromisarios tumbaron las cuentas de la pasada temporada, el presupuesto de la actual y el proyecto de la grada de animación en la anterior reunión celebrada el 27 de diciembre del pasado año. Fue un varapalo importante. Hoy tratarán de que los representantes de la masa social cambien de postura en el cónclave que también se celebrará de forma telemática.
Los socios rechazaron las cuentas de la campaña 2019-20 con 277 votos a favor y 439 en contra y el presupuesto de la 2020-21 con 256 sufragios positivos y 454 negativos.
No cobrar la cuota de 2021 y la rebaja salarial de los jugadores, medidas estrella
Desde entonces, la Junta ha tratado de tomar medidas para que esta situación cambie. No ha incluido en el orden del día de hoy el punto correspondiente a la grada de animación y sobre todo, ha propuesto no cobrar la cuota correspondiente a 2021. “La Junta Directiva desea someter a la consideración de la Asamblea que no se pase al cobro la cuota de socio del año 2021, es decir, que el apartado ingresos por cuotas de socio sea de cero euros”, decía el comunicado emitido el club. Una medida así que beneficia al bolsillo de todos los dueños de la entidad bilbaína seguro que tiene su impacto. De esta manera, el club da marcha atrás respecto a su polémico intento de cobrar un pequeño porcentaje del abono para contribuir a mantener todas las actividades “no ligadas al fútbol profesional”. Esta medida, que se sustenta en la hipótesis de que desde el inicio de la temporada 21-22 pueda asistir público a los estadios, añade 7,4 millones de déficit a las cuentas rechazadas anteriormente.
Además, la directiva hizo público el viernes el acuerdo con los jugadores del primer equipo para una reducción salarial del 8,43%, que puede llegar al 10, 26 % en función de determinadas circunstancias variables, y que tiene como objetivo mitigar las consecuencias de la pandemia. En abril del pasado año, la plantilla ya aceptó una primera rebaja, que finalmente fue del 6% después de que se reanudase la competición.
Elizegi y sus directivos se agarran también a la buena marcha del primer equipo. Cuando la pelotita entra, todo se ve de otra manera. La Junta tomó la decisión de destituir a Gaizka Garitano y nombrar a Marcelino en su lugar solo siete días después de la primera Asamblea. Desde entonces, la situación deportiva se ha reconducido. El equipo ganó la Supercopa frente a Real Madrid y Barça nada más aterrizar el nuevo entrenador, ha ido pasando eliminatorias de Copa hasta plantarse en las semifinales y en LaLiga parece haber recuperado el pulso tras la goleada al Getafe en San Mamés y fundamentalmente después del 0-4 endosado al Cádiz el pasado lunes, con una gran primera parte.
Un grupo de compromisarios ya ha adelantado su intención de votar ‘no’ y el presidente ha manifestado que no dimitirá en caso de que la Asamblea rechace sus propuestas. La matinal de San Mamés se presenta ‘calentita’ en la reválida de la Junta directiva.
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