El domingo por la mañana es un día sagrado para muchos estadounidenses, que acuden a sus iglesias para participar en los servicios religiosos semanales. Se calcula que unos 130 millones de personas, el 40% de la población, asisten a la iglesia cada semana. Los servicios suelen empezar entre las 9 y las 10 de la mañana y terminar alrededor de las 11, una hora que por lo visto es «preocupante» y que muchos temen, hasta el punto de que las 11 de la mañana del domingo es la hora más peligrosa de Estados Unidos.
La 11 de la mañana del domingo es la hora más peligrosa en EEUU
Es a las 11 de la mañana, cuando termina el servicio religios, en el que millones de fieles salen de sus templos y se exponen a posibles ataques con armas de fuego. En los últimos años, se han producido varios tiroteos masivos en las puertas o dentro de las iglesias, causando decenas de muertos y heridos en distintos puntos del país.
Uno de los casos más conocidos fue el de la iglesia New Life Church, en Colorado, donde un joven de 24 años mató a dos personas e hirió a otras dos en 2007. Otro fue el de la iglesia africana metodista episcopal de Charleston, en Carolina del Sur, donde un supremacista blanco asesinó a nueve personas en 2015. También se produjeron masacres en iglesias de Texas y California en 2017, 2019 y 2022.
Las iglesias refuerzan la seguridad en Estados Unidos
Estos hechos han llevado a muchas iglesias a reforzar su seguridad con personal armado o voluntarios entrenados. Pero los líderes religiosos coinciden en que la violencia no solo se debe al fácil acceso a las armas, sino también a los problemas sociales y culturales que afectan al país. La pandemia, la crisis económica, la polarización política, las tensiones raciales y las enfermedades mentales son algunos de los factores que contribuyen al aumento de la agresividad y la desesperación.
«Todo lo que está sucediendo en la cultura tiene consecuencias en la iglesia. La iglesia debe ser un lugar donde veamos manifestarse los problemas culturales. No debería sorprendernos que estemos viendo familias rotas en nuestro edificio, estamos viendo problemas de salud mental y personas que luchan con la ansiedad post-covid», ha explicado Brady Boyd, pastor principal de la iglesia New Life Church, en declaraciones a la CNN.
La iglesia debe ser un lugar donde se reflejen y se aborden los problemas de la sociedad, pero también donde se ofrezca esperanza y consuelo. Por eso, muchos pastores piden a sus feligreses que recen por la paz y el amor, y que no tengan miedo de acudir a su iglesia a pesar de esa hora «fatídica» de las 11 de la mañana que muchos temen. También piden a las autoridades que tomen medidas para prevenir y reducir la violencia armada, que cada año se cobra miles de vidas en Estados Unidos.
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