Las claves del Athletic de Garitano


Pocas palabras habrá que definan mejor a este Athletic como las de Aduriz del pasado martes. “Somos un equipo consistente, muy seguro compitiendo, muy competitivo. Es muy difícil que nos ganen. Hay que hacer muchas cosas para ganarnos y siempre nos dejamos opciones para ganar. Somos muy fuertes con el míster, con Gaizka no hemos perdido en Liga en San Mamés, que tiene que ser una fortaleza para nosotros”. Perfecta radiografía.



Es lo que se ha visto en estos tres primeros partidos del curso, las victorias ante Barça (1-0) y Real (2-0) y el empate (1-1) en Getafe. El técnico de Derio le dio una nuevas señas de identidad al equipo la pasada campaña. Presión alta, orden, buena defensa y un fútbol no de gran combinación pero sí con revoluciones altas que busca la portería del rival. Una fórmula en la que está ahondando y que está funcionando.

SAN MAMÉS, UNA FORTALEZA INEXPUGNABLE

“En San Mamés llevamos meses pasando por encima de la mayoría de los equipos, permitiendo muy poco, llegando bastante”, lanzó Garitano en la previa del encuentro ante la Real. Una visión bastante ajustada, como se pudo ver en el triunfo ante los donostiarras del viernes.

Precisamente, el conjunto rojiblanco no cae en su feudo desde la anterior visita de los realistas a Bilbao, el 5 de octubre de 2018, con aquel 1-3 que castigaba el desorden defensivo de los leones en los retornos después de lanzarse arriba a pecho descubierto sin acierto.

Desde entonces, la escuadra bilbaína ha enlazado 16 encuentros consecutivos en Liga sin hincar la rodilla en San Mamés. Catorce de ellos pertenecen ya a la etapa con Garitano que comenzó a principios de diciembre pasado y dos corresponden al mandato con Berizzo.

En este tiempo, el balance como local del conjunto bilbaíno es de diez victorias ante Girona, Sevilla, Betis, Eibar, Atlético, Levante, Rayo, Celta, Barça y Real, y seis empates con Valencia, Getafe, Valladolid, Barça, Espanyol y Alavés. Es un campamento base fiable para la ascensión que se quiera acometer. La pasada campaña fue principalmente la permanencia, aunque al final hubo opciones europeas. Y en el actual curso se supone que se quiere convertir en una gran fuente de recaudación para recuperar el billete europeo.

INTENSIDAD DEFENSIVA Y ORDEN PARA ASFIXIAR AL RIVAL

El conjunto bilbaíno, apoyado en una buena condición física, despliega una presión alta con la que asfixia al rival muy lejos de la portería que ahora está defendiendo Unai Simón, sin debates. Y, si el equipo contrario supera ese primer desafío, más replegados los leones también mantienen el orden y una contundencia en la destrucción que ya no se recordaba por estos lares.

Con esta propuesta han dejado secos al Barça (1-0) y a la Real (2-0). Y el Getafe (1-1) le hizo un gol en ese inicio de partido que no entraba en los planes de nadie. Con esos tantos tempraneros, primero el de Raúl García en el minuto 5 y después el de Mata en el 12. Después, ambas escuadras llevaron el encuentro al callejón sin salida que se presumía de salida.

Ante Barça y Real, los de Garitano han desarrollado un plan similar. Ante dos equipos que tratan de sacar la pelota jugada desde su propia área. Sobre todo en la primera parte, los rojiblancos fueron a buscar a su rival hasta ese inicio del juego atrás. Para ir después replegándose un tanto a medida que avanzaba el cronómetro. Desactivaron con efectividad a los departamentos creativos de sus enemigos.

El medio campo realista venía de deslumbrar en Mallorca, pero no dejaron entrar en juego a los Odegaard, Illarra, Merino y compañía. Además, en los finales de partido pueden defender su área, pero sin sensación de sufrir.

EFECTIVIDAD, MANEJAR LOS ENCUENTROS Y ESTILO PROPIO

La escuadra bilbaína tuvo menos posesión que los de Imanol en el encuentro del pasado viernes en San Mamés, un 40% por un 60%. Sin embargo, resultó clave la eficacia inicial. Diana en los dos primeros disparos de Williams y Raúl García. Lo que propició que los leones pudiesen jugar con los pasos del partido.

“Los equipos buenos saben manejar los tiempos de cada partido”, dijo Garitano en la previa del choque con el Getafe, resaltando que los azulones sabían hacerlo.

Ante la Real fueron replegando líneas paulatinamente ante un rival que nunca supo qué hacer. Ni cuando los leones les fueron a buscar a su área con agresividad, ni cuando les concedieron algunos metros para el ‘haga usted lo que sepa’ y agazaparse para golpear a la contra.

Con todo, pese a tener menos tiempo el balón en su poder,el Athletic remató en 15 ocasiones por 2 los donostiarras que, además, llegaron en los últimos compases. Y en medio de posibles debates sobre estilos y propuestas, Aduriz ya había lanzado que “para mí el que mejor juega es el que más ocasiones de gol crea. Pero hay muchas formas de crearlas, muchas maneras de hacerlo. Cada uno intenta jugar sus bazas para crearlas y materializarlas”. Literal. Y los leones creen en la de Garitano.


LOS GOLES DEL TRIDENTE ADURIZ, WILLIAMS Y RAÚL GARCÍA

Todo trabajo de equipo en el fútbol adquiere el mayor sentido cuando se ve traducido en el área contraria. Cuando llega la hora de definir para la victoria. Y en este sentido, en el conjunto rojiblanco ya han mojado los tres integrantes de su tridente goleador, Aduriz, Williams y Raúl García. De distintos colores y momentos.

El de más relevancia en estos tres encuentros ha sido el de Aduriz ante el Barça. Por su espectacularidad con ese tijeretazo. Por su repercusión al ser un tanto con el que se tumbó al vigente campeón de Liga. Por el instante del juego, a un minuto del final oficial, cuando además acababa de salir al terreno de juego. Por emotividad, ya que el ariete vive su última campaña en activo y quiere despedirse ‘matando’.

Después llegó el de Raúl García en el Coliseo Alfonso Pérez. Del navarro siempre se destaca su garra, pero tiene detalles técnicos que no se ven en otros de la plantilla. Como en ese golpeo sutil entrando al segundo palo para anotar ante el Getafe. Y qué decir del que anotó ante la Real. Colocado, quizás con algo de suerte, pero dando la sensación de que había pillado fuera de sitio a Moyá por el rabillo del ojo antes de lanzar. Era, además, su gol 50 (38 en Liga) como león. Pichichi rojiblanco por ahora.

Y el que lo fue en la pasada campaña, Williams, también ha inaugurado su cuenta particular. Con un gol de nueve a la Real, de estar en boca de gol. Para empujar. Algo distinto a lo que suelen ser otros aciertos, más explotando su velocidad. Se buscan más artilleros.

SEGUNDO MEJOR ARRANQUE DE LOS ÚLTIMOS ONCE

El conjunto rojiblanco ha firmado su segundo mejor arranque liguero de las últimas once campañas. En el curso 2009-10, con Joaquín Caparrós en el banquillo bilbaíno, se consiguió un pleno, con tres victorias para sumar nueve puntos. Entonces, vencieron al Espanyol (1-0) de Mauricio Pochettino en la jornada inaugural con una diana de Toquero, 0-1 al Xerez conducido entonces por el Kuko Ziganda con un tanto de David Prieto en propia puerta y 3-2 al Villarreal entrenado por Ernesto Valverde, con doblete de Llorente y una muesca de Javi Martínez superando los aciertos de Cani y Cazorla.

Además, este Athletic de Garitano iguala el registro de los siete puntos obtenidos en las tres primeras funciones ligueras de la temporada 2017-18 con Kuko Ziganda como técnico, con tablas sin goles con el Getafe y triunfos ante Eibar (0-1) y Girona (2-0).

CAPA, EL ‘ARMA SECRETA’ Y EL DINAMISMO DE UNAI LÓPEZ

Con el cambio de técnico la pasada campaña, Capa ya se convirtió en un gran activo. Potencia descomunal para el lateral derecho. En el inicio de la actual ha cobrado aún más protagonismo. Con esas subidas ya marca de la casa hasta el último instante de los encuentros.

El lateral de Portugalete ha dado ya tres asistencias. En el gol de Aduriz al Barça, en el de Raúl García en Getafe y en el de Williams a la Real. Defensor y en un equipo que prioriza la seriedad, el orden y la labor de zapa, pero convertido en un ‘arma secreta’ que rompe por su costado.

Hasta la fecha, Yuri, el otro lateral, ha tenido un arranque con menos incidencia arriba, pero parece que creciente. Ante la Real soltó dos zambombazos sobre la puerta de Moyá. Uno en el final de cada tiempo. Con la derecha y con la izquierda. Haciendo bueno aquello de que no hace falta subir mucho, sino subir bien para hacer daño.

En la banda ambos han tenido por delante a Muniain, sin brillo pero con un trabajo sacrificado por el equipo. Núñez, nuevo internacional, ha cumplido en ausencia de Iñigo Martínez. Garitano le mandó al banco con la recuperación del de Ondarroa y prefirió a Yeray. Cosas del fútbol. Y buena entrada ha tenido Unai López, dinamismo para la media junto a un sólido Dani García. El donostiarra se ha endurecido y deja detalles de calidad.


Source link