10: INCONDICIONALES
Gipuzkoa tomó Miranda de Ebro. La provincia se volcó con el partido más importante de la historia de la Real en los últimos 32 años y la afición estuvo a la altura de la cita. El fondo norte de Anduva se pintó de txuri urdin hasta la celebración final. Algunos valientes, sin entrada, se hicieron socio durante la semana para animar a los suyos
10: PERFECCIÓN
El cuadro dirigido por Imanol Alguacil rozó la perfección en todos los aspectos del juego. La presión por hacer historia no pudo con un equipo grande que ha aprendido a ser ganador. Los duelos eran txuri urdin, las segundas jugadas caían en pies visitantes y defensivamente no hubo un sólo resquebrajo.
10: SON LEYENDA
Este grupo de jugadores ha conseguido que una generación pérdida, aquella nacida más allá de los 90, que tenga, e nuevo, la oportunidad de tocar la gloria del frío metal. Pase lo que pase en La Cartuja de Sevilla, la Real 19/20 ya es leyenda por hacer sonreír a toda una provincia y parte del extranjero. Queda lo mejor.
10: EL DIOS IMANOL
“Vamos a por ellos, Dios”. La frase para la historia del jefe en la sala de prensa de Zubieta no puede describir mejor el sentimiento de ser de la Real. Imanol Alguacil ha conseguido que todos sus jugadores crean en un mensaje. El oriotarra no especuló, ideó un plan perfecto y tumbó a un Mirandés que solo pudo rendirse.
10: “THIS IS ANDUVA”
La Real y el Mirandés serán, desde ayer, un club amigo. El modesto campo de Anduva vibró hasta que se quedó sin fuerzas. Ambas aficiones, hermanadas para siempre, se despidieron entre aplausos reconociendo el mérito de las dos escuadras. “Lo que pasa en Miranda, se queda en Miranda”, se gritaba.
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