Raúl Rodríguez Navas (Sevilla, 1988) sigue esperando a que todo vuelva a la normalidad en su casa de Pamplona. El exjugador de la Real y actual defensor de Osasuna desea volver a vestirse de corto mientras sigue acordándose de su etapa en Donostia y las amistades que fraguó como txuri urdin. El sevillano atendió muy amablemente la llamada de MD.
¿Qué tal le va?
Bastante bien. De vez en cuando sí que me dan momentos de bajón, pero bien. Acostumbrado ya y haciéndome a la vida de estar en casa.
¿Imagino que manteniendo la forma dentro de lo que cabe no?
Sí. Tenemos un plan que nos ha pasado nuestro preparador físico y por las mañanas suelo estar haciéndolo. Tengo las herramientas en casa para hacer lo que nos pide y estoy trabajando lo mejor posible.
¿Cree que volverá la competición?
Hace unos días te diría que sí, pero ahora, estando en la situación en la que estamos, no lo sé. Debería respetarse el tema de la sanidad por encima de todo y volver cuando el Gobierno o la autoridad pertinente nos garantice al cien por cien que todo va bien porque tenemos familia y gente con la que dormimos, hijos con los que estamos en el día a día.
Se planteaba jugar casi cada 48 horas y en verano. ¿Cómo lo ve?
Yo no me veo cada 48 horas jugando, pero es una opinión personal. El otro día vi una entrevista a Miguel Ángel Moyá y decía que situaciones excepcionales requieren medidas excepcionales. Si el partido en vez de 90 minutos fuera de 60 ó 70 minutos, sería diferente, se podría llevar a cabo. Estamos en una situación diferente a la que normalmente vivimos y puede ser una medida bastante buena.
¿Qué balance hace de la temporada?
Llevo con la rodilla liado bastante tiempo. He tenido muchos problemas hasta que me he tenido que operar de ella pero Osasuna traía una dinámica muy positiva desde Segunda y Aridane y David García estaban haciendo una temporada magnífica, por lo que creo que me toca trabajar desde la sombra para volver a ser el Raúl Navas que he sido.
¿Cómo está su situación contractual con Osasuna?
Tengo otro año más aquí en Pamplona, si todo sale bien será en Primera y estoy muy contento porque he encontrado un grupo muy bueno y afín a mí. Estoy muy contento de estar aquí en Pamplona.
¿Entiendo que no hay opción de retornar a Donostia no?
No. Es una cesión con opción a compra, aunque la cantidad es muy pequeña. Creo que el año que viene estaré en Osasuna. Sí es verdad que echo algo de menos San Sebastián por los compañeros que tenía, he pasado cuatro años allí. Pero me he encontrado un grupo espléndido aquí y estoy muy orgulloso de estar en Pamplona y de vestir la camiseta de Osasuna.
¿Mantiene el contacto con la gente de San Sebastián?
Sí, sí. He vivido allí cuatro años muy bonitos y tengo muchas amistades, tanto excompañeros con miembros de la actual plantilla de la Real. Es verdad que por la edad hay más jugadores que ya se han retirado de la actual plantilla pero sigo manteniendo relación y son, más que compañeros, amigos.
¿Qué tal ve a la Real?
Lo están demostrando día tras día y son un grupo como es la Real. Un club familiar, unido y creo que este año se han dado todas las piezas para que funcione ese reloj y que estén en Champions y en la final de la Copa. Imanol es el entrenador ideal para la Real por sentimiento y sabiduría. Tiene muchas bases para enseñar y para que él también siga aprendiendo. Va a ser el entrenador del futuro de la Real y Aperribay lo ha visto. Lo vio ya hace bastante tiempo.
¿Hay algún nombre más que destacaría?
Merino es un jugador que no hace mucho ruido pero que es muy completo. Va por arriba bien, técnicamente es muy bueno, es agresivo y va bien al choque. A Elustondo ya le vi en pretemporada que le faltaba recuperarse bien y dar un pasito adelante. Este año también hemos conocido a Isak. Willian José es una figura que da mucho al equipo. Si Januzaj no fuese, en términos andaluces ‘hijo puta’, sería el mejor jugador de Europa. También han ganado mucho con Monreal, da empaque al equipo. Y Zaldua es un jugador que sabe equilibrar ese lateral derecho tanto ofensiva como defensivamente. Ofensivamente no es Dani Alves, pero defensivamente es un jugador que es muy difícil de driblar.
¿Cómo ve la final de Copa?
Me duele decirlo pero creo que la final será a puerta cerrada. Creo que es una obviedad. No se pueden meter 60.000 personas en un estadio en la situación en la que estamos. Pero creo que va a ser una final bonita porque es un derbi. A nivel de España es diferente y creo que no se ha vivido nunca en una final. Se vive con pasión pero con respeto, no es uno de esos que se vive con violencia, lo hemos visto. Cuando la Real juega en San Mamés se respeta al aficionado de la Real y si el Athletic juega en Anoeta pasa igual. Encima iba a ser en mi ciudad y me duele que no haya 100.000 vascos en Sevilla. Para la economía vendría muy bien, pero esta es la situación que tenemos que vivir. Que sea lo mejor posible para los dos equipos, pero que gane la Real con gol de quien quieras.
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