El río Corozo se ha convertido en una de las principales fuentes de búsqueda de alimentos para los residentes de Sabaneta, el poblado donde nació el fallecido expresidente Hugo Chávez en el estado Barinas, al oeste de Venezuela. Su principal actividad, la agrícola, ha sido golpeada por la prolongada recesión económica y la hiperinflación.
Los habitantes de Sabaneta esperan preocupados el desenlace de las elecciones del domingo en la que se escogerá al nuevo gobernador, en unos comicios que se repiten luego que el Tribunal Supremo de Justicia inhabilitara al candidato de la oposición. La entidad, en las exuberantes llanuras del país sudamericano, ha estado gobernada durante dos décadas por la familia Chávez.
En la campaña electoral, el partido gobernante, que tiene como candidato al excanciller Jorge Arreaza, ha llevado a la población desde alimentos a precios subsidiados, medicamentos, gas doméstico hasta gasolina, la cual escasea en la nación OPEP. Incluso, gobernadores de otras entidades del país han enviado insumos a Barinas, dijeron los residentes.
Pero los habitantes de Sabaneta no creen que esa relativa mejora de las últimas semanas se mantenga en el tiempo.
Foto archivo Reuters
“Aquí no hay fuente de trabajo, aquí la fuente de trabajo es cuando viene (del río) el pescado”, dijo Manuel Chinchilla, un agricultor de 44 años, que ha dejado de trabajar con frecuencia en los fundos por la falta de semillas, fertilizantes y combustible. “Nos olvidaron completamente”, agregó.
La inflación, que al cierre de 2021 se ubicó en 686.4%, ha deteriorado con fuerza los salarios de los venezolanos, y la actividad económica aún no ha logrado recuperarse de los 16 años de controles. Si bien las regulaciones se han flexibilizado desde 2019 permitiendo la mayor circulación de divisas, las medidas han llegado tardías, según analistas.
En las zonas que dependen de la agricultura, la crisis es mayor por las fallas con los servicios básicos, los insumos y el diésel, lo que se refleja en Sabaneta, inundada con imágenes de Hugo Chávez en vallas, murales y gimnasios. En una plaza hay una estatua del expresidente en la que tiene una mano en alto.
“Nos está llegando la comida (alimentos subsidiados) dos veces al mes, esperamos que eso se mantenga y no sea sólo por las elecciones, también el gas para cocinar“, dijo María Guedez, de 25 años, que estaba preparando pescado cerca del río para sus hijos, que disfrutaban de un baño en el Corozo.
Foto archivo Reuters
Durante la breve campaña electoral, los oficialistas se desplegaron en los municipios de la entidad junto a Arreaza y destacaron su relación con la familia Chávez. Los principales líderes de la oposición acompañaron en los recorridos por las calles al candidato de la coalición opositora, Sergio Garrido.
“Yo estoy de acuerdo que si aquí ganó la Mesa de la Unidad (o la coalición opositora) tenían que entregarle eso a la Mesa de la Unidad, pero como ellos están en el poder no le entregaron nada, repiten las elecciones para ver que trampa pueden hacer para ganar”, dijo Miguel García, un agricultor de 52 años.
Si “Arreaza llega a ganar en Barinas, cuando mucho durará tres meses”, dijo García al explicar que el excanciller no podría cumplir todas sus promesas de campaña.
Reuters
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