Lo que son las cosas. Kevin Magnussen empezó el Gran Premio de Brasil de F1 realizando la clasificación de su vida, con una milagrosa pole que queda para la historia. Pero dos días después, terminó la carrera de Interlagos de la peor de las formas, con un accidente en la vuelta 1. No fue su culpa, pero acabó abandonando. Daniel Ricciardo le dio un golpe por detrás que fue suficiente para que el danés trompeara. Y, cosas del destino, el coche trompeado del danés acabó golpeando marcha atrás al propio Ricciardo, provocando el abandono del australiano y la entrada del ‘Safety Car’.
El accidente se produjo después de unos primeros metros muy limpios y sin cambios de posiciones en cabeza. George Russell salió muy bien y mantuvo la primera plaza ante Hamilton (2º), Verstappen (3º), Pérez (4º) y un Norris (5º) que estuvo cerca de pasar al mexicano de inicio. Todos ellos salieron con la goma blanda, mientras que Leclerc (6º) y Sainz (7º) lo hicieron con la goma media para intentar una estrategia distinta que les permitiera ganar posiciones en boxes a lo largo de la cita.
Por su parte, Alonso pasó por la primera curva en la 15ª posición, por detrás de su compañero Esteban Ocon (14º), con el que en la carrera al sprint se tocó dos veces y originó una gran polémica.