Simeone tendrá que pulir a Lodi en lo defensivo


El Atlético de Madrid y el Athlético Paranaense alcanzaron un principio de acuerdo para el traspaso de Renan Lodi al equipo rojiblanco, según informó el cuadro colchonero en su página web.

El acuerdo queda pendiente de su formalización definitiva así como de los exámenes médicos que se hagan en la capital de España. La idea del club rojiblanco es que ya esté listo para la vuelta al trabajo del Atlético este mismo 4 de julio.

¿Pero quién es este joven jugador casi desconocido para el fútbol europeo? Con apenas 21 años y en la plantilla profesional del Athlético
Paranaense desde 2016, se trata de un carrilero decimonónico del fútbol brasileño. Zurdo, ronda el 1,80 de altura, hábil, rápido, con buen manejo de su pierna derecha, y un físico portentoso.

Los que le conocen hablan de él como un lateral rápido, que centra muy bien, que recupera la posición de forma veloz. Completísimo en muchos aspectos, pero también con esa ofensividad que caracteriza a los laterales brasileños.

Que sus referentes sean Marcelo y Álex Sandro no es casualidad, porque ambos son muy atacantes, como es el caso de Renan Lodi. En la primera división del Athlético
Paranaense, Lodi ha jugado 49 partidos oficiales, con cuatro goles y ocho asistencias, producto de su capacidad de apoyar en el ataque, una característica típica de casi todos los laterales que ha generado el fútbol brasileño en las últimas décadas.

En el club colchonero saben que una de las labores que tendrá Simeone en su caso será la de pulir su trabajo defensivo. El Cholo quiere laterales ofensivos sí, pero también que muerdan en defensa. Algo que no todos pueden hacer. En el curso pasado ya vimos como un lateral como Arias sufría en esta faceta, algo que hizo que el cuerpo técnico no llegase a apostar por él al 100%.

Por eso, gran parte del trabajo que el Cholo tendrá que hacer en esta pretemporada con el brasileño será precisamente ése. Sus números defensivos hablan por sí solos, no es el fuerte del lateral, que luce más en ataque. En este curso apenas promedia un 0.3 ‘tackle’ por partido, es decir, menos de una entrada para robar el balón; o sólo tiene un robo de balón de media; por contra promedia casi tres faltas por encuentro, algo que demuestra que es intenso pero le falta medir. Aunque es cierto que gracias a su velocidad apenas le driblan o desbordan, un 0,3 por partido, a lo que suma un despeje de media. En cuanto a sus números en duelos aéreos, un 0,7 en ganados por partido y un 1,3 en perdidos.


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