En el hogar pasamos buena parte de nuestro tiempo. Con el devenir de la pandemia mundial pasamos más tiempo en casa que nunca. Es por tanto fundamental para nuestra salud mental y felicidad que nos sintamos cómodos en ella.
¿Pero sabía que el aire en el interior de su hogar puede estar hasta cinco veces más contaminado que en el exterior? Una de las principales razones está en las sustancias químicas de los productos domésticos como el formaldehído. La iniciativa de la etiqueta ecológica de la UE aborda este problema garantizando al consumidor que los productos utilizados no tienen efectos negativos para la salud humana o el medio ambiente. Por ejemplo, los productos domésticos que tienen la etiqueta ecológica de la UE bajo contenido de formaldehído y otras sustancias perniciosas, incluyendo los perfumes que provocan reacciones alérgicas.
La etiqueta ecológica de la UE puede emplearse en muebles, colchones, pinturas, productos de limpieza, azulejos, cubiertas de suelos y tejidos. Estos productos, además de tener una gran calidad, tienen un bajo impacto medioambiental y resultan positivos para nuestra salud y bienestar porque aprovechan mejor el agua, la energía y materias primas durante todo su ciclo de vida.
Si bien los suelos, armarios y muebles de madera ofrecen una estética agradable, este tipo de decoración puede tener un efecto pernicioso para el medio ambiente. La tala de bosques de manera no sostenible contribuye al cambio climático y a la pérdida de biodiversidad, sin embargo, la etiqueta ecológica de la UE garantiza que los suelos y muebles se fabrican a partir de bosques sostenibles. La aplicación de principios de ecodiseño implica que estos objetos también pueden repararse y desmontarse para su reutilización.
Es más, la etiqueta ecológica de la UE solo se concede a productos domésticos que reducen el embalaje innecesario y reducen los residuos plásticos, entre ellos los microplásticos. De esta forma se reduce la cantidad de residuos que acaba dañando la fauna marina de nuestros océanos.
Así que puede respirar tranquilo y relajarse sentado en el sofá o arropado en la cama, estando seguro de que la etiqueta ecológica de la UE contribuye a transformar una casa en un hogar que además de acogedor es sano y respetuoso con el medio ambiente.
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